La provincia pondrá en marcha desde hoy una serie de trabajados para descomprimir la crítica problemática hídrica en la zona rural y prevenir nuevas inundaciones en la pequeña localidad de Sanford donde si bien la situación se normalizó en el casco urbano al descender las aguas aún persististe la preocupación por los excedentes provenientes de los campos.
El compromiso fue asumido ayer por el ministro de Aguas del gobierno santafesino, Antonio Ciancio, tras una reunión que mantuvo en la sede comunal con autoridades y productores damnificados tanto de Sanford como de Arequito y Chabás.
El encuentro sobrevino tras una movilización de un grupo de vecinos que se concentró frente la comuna y cortó la ruta nacional 33 que atraviesa la localidad para exigir medidas tendientes a evitar situaciones de emergencias como las sufridas recientemente.
Si bien hubo momentos de tensión finalmente retornó la calma al suscribirse una suerte de acta compromiso, que el propio Ciancio redactó de puño y letra y luego leyó a los manifestantes, al culminar la reunión que encabezó tras ser requerida su presencia, lo que derivó en el levantamiento del piquete y la liberación de la ruta para la circulación del tránsito.
Acuerdo. Lo acordado consiste en cinco puntos que incluyen obras y tareas hídricas para facilitar el drenaje del agua acumulada en los campos y proteger las poblaciones de posibles inundaciones.
Una de los acciones previstas contempla “la construcción de un aliviador desde el bajo Arequito hasta el río Carcarañá”, cuyo proyecto fue desarrollado hace años, aunque nunca concretado por un “ingeniero (de apellido) Gandolfo y denominada Alternativa 2”, según se consigna en el acuerdo.
Asimismo se convino “limpiar el canal existente (en la zona de Sanford-Arequito) desde la loma de Floco hasta el Arroyo Saladillo” además del “perimetral (que bordea la localidad) hasta el camino a (Colonia) Las Flores, remover y remplazar alcantarillas existentes”. Y a ello, además de fijarse para hoy el inicio de las obras, se suma como compromiso “reparar el terraplén” de contención que días atrás desbordó e inundó a la mitad del ejido urbano de Sanford al tiempo que, por pedido de las autoridades locales y vecinos, “no se realizarán trabajos de alteo”.
“Ya salgo para la sede del ministerio en Rosario a coordinar las tareas”, expresó el ministro al recibir el aplauso de los vecinos como señal de aprobación a lo resuelto para luego indicar que la provincia afectará a lo planificado herramientas propias y contratadas.
“Esto no termina acá, sino que recién comienza”, prometió el funcionario, y renovó el compromiso de seguir “trabajando en forma conjunta por el camino del diálogo”, ya que “esta gobierno dio muestras de escuchar, aprender y corregir”, para luego cuestionar actitudes “violentas” como las registradas días atrás en Sanford cuando en el marco de una movida similar a la de ayer, aunque más virulenta “un exaltado agredió y lastimó a dos funcionarios”, indicó el ministro.
Aunque los manifestantes valoraron y reconocieron la actitud asumida por Ciancio tras desembarcar en Sanford en este momento conflictivo y la ya destrabada protesta, tampoco ocultaron su malestar por la falta de obras que “podrían haber evitado lo sucedido en la localidad”.
“Acá lo importa es que se empiecen los trabajos prometidos para empezar a confiar”, le advirtió sin rodeos uno de los tantos vecinos que se movilizó para exteriorizar su descontento y reclamar soluciones.
Las tareas que posibilitarán drenar gran cantidad de agua de los campos hacia el Carcarañá implica un monitoreo permanente por parte de Hidraúlica de la provincia para que el desagote no genere desbordes que afecten zona pobladas.
Al respecto el jefe comunal de Sanford, Julián Gironelli, aclaró a LaCapital que “lo acordado sólo tiene como intención descomprimir la situación de forma prudente y responsable para no perjudicar a nadie”. Y destacó lo convenido porque “apunta a resolver las cosas integralmente para que nadie resulte afectado”.