Con un perfil sumamente bajo, se trata de unas compañías más fuertes del farming local. La sociedad es presidida por Enrique Urbano Duhau (foto), a quien secunda Alejandro Carlos Duhau.
Distintas fuentes le asignan a AED unas 25.000 hectáreas de producción agrícola en campos propios, a las que se le suma una cantidad variable bajo arrendamiento, que habría rondado las 55.000 hectáreas en años recientes.
La producción granaria habría llegado a las 350.000 toneladas.
Los campos propios se distribuyen entre el oeste bonaerense, Santa Fe y Chaco.
Por otra parte poseen producción lechera, a partir de un rodeo de unas 1.800 vacas en producción.
Pero uno de los puntos más fuertes es el feedlot que se encuentra en la estancia La Candelaria, en Trenque Lauquen. El campo, de unas 12.700 hectáreas, lleva el nombre en honor a Candelaria Fouillerac de Duhau, quien tras enviudar fue la que tomó las riendas del negocio familiar en los albores del siglo XX y la que consolidó la tradición agropecuaria de la familia.
Entre este feedlot, más el de Santa Teresa (donde también hay lechería) se llegan a engordar unas 70.000 cabezas por año. La AED ha batido records de ensilado de maíz como base de la alimentación de los novillos. En la campaña 2012/13 fueron 4.000 hectáreas las que se picaron con este fin.
En 2012, y pensando en la operación que llevan adelante en el Chaco, AED creó las empresas Bioterai SA y Biomaíz SA, para avanzar con un proyecto de producción de bioetanol en Avia Terai, en pleno corazón chaqueño. Formalmente, las empresas se constituyen entre AED y Economart SA, esta última más vinculada con los arrendamientos de campos.
El proyecto recibió la aprobación por parte de la Secretaría de Energía de la Nación para proveer al cupo interno, con un volumen anual de 121.000 metros cúbicos. De acuerdo a información sobre el proyecto, la inversión rondaría los 90 millones de dólares, de los cuales 50 provenían de créditos del Bicentenario y la banca pública, mientras que los otros 40 venían de capital propio y de inversores.
La idea era aprovechar la ventaja del maíz lejos de los puertos e integrar la industria al engorde a corral, para lo cual de las 320.000 toneladas de maíz al año que consumiría la planta, se produciría el destilado seco (WDGS) para la ración de la hacienda.
Sin embargo, el proyecto se encuentra en stan by, por ahora.
