Esta semana la ministra de la Producción Débora Giorgi aseguró que ‘no es natural’ que los productores aún conserven un stock de 9,0 millones de toneladas de soja 200/7/08.
Sin embargo, un artículo publicado en el Informativo Semanal de la Bolsa de Comercio de Rosario salió a aclarar que el stock no sólo no es de 9,0 millones de toneladas ‘según la entidad podría estar en el orden de 5,5 M/toneladas’, sino que además ese fenómeno, en buena medida, es promovido por la propia política del gobierno nacional.
El artículo de la BCR indica que el mayor remanente de soja sin comercializar ‘está apartado de los patrones que se venían observando en los últimos ciclos agrícolas, pero indudablemente no es nada descabellado en función del panorama comercial’ actual.
El texto luego indica que no debería pasarse por alto que ‘la demanda externa no encuentra el camino allanado para que los negocios se pacten y se concreten con la misma fluidez que encuentran entre nuestros competidores: EE.UU. y Brasil, para el caso del complejo soja’.
‘Uno de los principales obstáculos para la fluidez del comercio exterior, sin lugar a dudas, es la existencia del ROE Verde, implementado por la resolución 543 (de la Oncca). Este régimen es, en la práctica un sistema de licencias previas de exportación, que puede llegar a desalentar el cierre rápido de negocios con nuestros clientes’, añade.
‘Hoy EE.UU. tiene exportado un 15% más de soja que el año anterior (21,63 millones de toneladas), casi el 70% del saldo exportable (del presente ciclo), cuando la media de cinco campañas (anterior) estaba en el 67%’, explica la BCR.
Además, el artículo explica que ‘siendo Argentina un exportador industrial de soja (es decir: de harina, pellets y aceite), ha visto retroceder la participación del procesamiento de soja frente a la exportación directa de grano’ (esto a causa de la crisis financiera global).
‘La incertidumbre económico financiera global hace que las transacciones se realicen con cautela y mayor gradualismo. En un mercado con valores a la baja, nadie quiere comprometer importantes volúmenes de mercadería si no tiene asegurada o bien calibrada la demanda del consumidor’, agrega.
De hecho, esta semana hubo cancelaciones chinas de compras de soja estadounidense, pasándose a la mercadería de origen brasileña (que empezó a abaratarse con respecto al producto con origen en EE.UU).
‘En Brasil, al igual que en Argentina, la nueva campaña 2008/09 empieza también con un abultado stock de soja, producto de un uso total ajustado a la baja frente a proyecciones iniciales. El 2008/09 se inicia con 3 millones de toneladas de reserva de soja, cuando la media de los dos ciclos anteriores estaba en 1,6 a 1,7 millones’, explica la BCR.

