Los cinco grupos comprenden a catorce empresas argentinas, dos de China, dos de Brasil, una española, una de Francia y una de Corea y deben aportar un financiamiento no menor del 50 por ciento del monto de las obras.
Es la tercera vez que el gobierno nacional anuncia la licitación de estas obras, que hasta ahora no habían tenido avances.
El funcionario vaticinó que Santa Cruz vive una “verdadera revolución de empleo” por la demanda que provocará la puesta en marcha de las que serán las dos obras energéticas más importantes de las últimas dos décadas, y destacó el aporte que realizarán las centrales cuando funcionen a pleno.
“Esta obra viene a cambiar definitivamente los destinos, no solamente de Santa Cruz, sino de la región patagónica y de la matriz energética argentina”, afirmó De Vido en el acto de apertura de sobres de la licitación en el Ministerio de Economía.
Destacó que a partir de mayo o junio, cuando el Gobierno inicie los trabajos, se verá una verdadera “revolución de empleo, de plena ocupación y de actividad económica en la provincia” ubicada en el sur del país.
La apertura de sobres de la licitación pública nacional e internacional fue realizada en la sede del Ministerio de Planificación.
Ambas represas se construirán sobre los márgenes del Río Santa Cruz. El Ministerio de Planificación había tomado sobre finales de 2012 la decisión de aumentar el presupuesto estimado para las obras, cuyo valor tope se incrementó en 12,6%, de los $21.600 millones calculados a mediados de año a 24.358 millones.
El proyectado complejo hidroeléctrico Kirchner-Cepernic será el tercero más grande en el país después de las existentes binacionales Yacyretá (3.200 MW) y Salto Grande (1.890 MW).

