En el Centro de Convenciones de la UCA, en Puerto Madero, comenzó el congreso que busca promover los sistemas de producción sustentables. En su apertura, Ramiro Ruiz, Rafael Llorente y Gastón Fernández Palma coincidieron en que la situación es ambivalente, debido a las buenas oportunidades que ofrece el mundo para el sector agropecuario y a las serias dificultades que pone el gobierno nacional para aprovecharlas.
A primera hora de la mañana del martes 7 de junio comenzó el congreso organizado por la consultora SEMA, que en sus dos jornadas expondrá todas las herramientas necesarias para maximizar los rendimientos en un marco de sustentabilidad. En el centro de convenciones de la Universidad Católica Argentina, en Puerto Madero, más de treinta especialistas de todas las regiones productivas ofrecerán sus conocimientos sobre los dos cultivos emblemáticos de la producción estival, y que representan la estructura de rentabilidad de la mayoría de las empresas agrícolas argentinas.
Ramiro Ruiz, directivo de SEMA, inauguró el décimo congreso de la consultora afirmando que “Hoy, después de diez años, el objetivo de promover los sistemas sustentables de producción se mantiene intacto. Sin embargo, cambió el contexto: hoy es ambivalente, porque fronteras adentro lo vivimos con cierta hostilidad. Tenemos grandes inconvenientes que se manifiestan en trabas, en alteraciones del mercado, en mecanismos que como consecuencia generan subsidios y crean un círculo vicioso, que a la larga suscita dificultades”.
En su opinión, el mundo ofrece numerosos elementos favorables para el país y para el futuro del sector. “La agricultura tiene para ofrecer al mundo soluciones muy importantes a los problemas que lo aquejan, como el hambre, la pobreza, la energía, el medio ambiente y la importancia del agua, y todas las soluciones, a futuro, van a pasar por la agricultura”.
A continuación, Gastón Fernández Palma, presidente de AAPRESID, coincidió con la visión de Ruiz al afirmar que “es el momento más indicado para hablar de una realidad contrastante, por el desconcierto que nos provocan algunas medidas oficiales y las conductas de algunos integrantes de la cadena que impactan sobre la economía y las finanzas de los productores, en un momento en que el mundo genera oportunidades verdaderamente competitivas”.
Respecto de la importancia de la sustentabilidad en la estructura empresarial, sostuvo que “A futuro, la certificación de procesos va a ser un requisito imprescindible para mantenerse en el mercado”, y resaltó que se debe respetar el pago de las patentes de los nuevos avances en biotecnología.
Finalmente, Rafael Llorente, presidente de AACREA, contó que tras presentar el movimiento CREA en un congreso de Guadalajara dedicado a la innovación volvió a ver con claridad que el sector agropecuario argentino es de excelencia: “En otros países, la innovación no tiene nada que ver con lo que hacen los productores agropecuarios locales. En otros países, la innovación es inducida, y los productores hacen recetas. Acá, nuestros productores le aportan valor al conocimiento”.
Desde su óptica, es importante generar “empresas que no sean sólo negocios”. De esta manera, consideró que agregar valor a las empresas agropecuarias implica cumplir con los deberes empresarios, como pagar las regalías que correspondan, evitar el trabajo en negro o pagar salarios adecuados. “Eso es agregar valor”, concluyó.
Durante la primera jornada del congreso se abordarán temáticas como Ecofisiología y genética de maíz y soja, bajo la coordinación de Emilio Satorre; avances en biotecnologías, a cargo de Héctor Huergo; y nutrición y manejo, panel coordinado por Martín Díaz-Zorita y Fernando García, en el que se pondrá en primer plano la importancia del agua en la estrategia productiva y se analizarán los últimos sistemas de nutrición y producción de cultivos.