La lista de frigoríficos afectados por la escasa disponibilidad de hacienda y las restricciones oficiales para exportar es cada vez más extensa (y con ella el problema social de miles de trabajadores sin empleo o con futuro incierto).
Infocampo.com.ar accedió a una lista provisoria de empresas con inconvenientes económicos y financieros que por estas horas está en manos tanto de sindicalistas del sector como de funcionarios del Ministerio de Trabajo.
Entre las firmas en problemas se menciona a las empresas controladas por la compañía brasileña JBS Col-Car (con unos 100 trabajadores con garantía horaria) y Consignaciones Rurales (despidos y alrededor de 300 operarios que aguardan la efectivización del pago de la garantía horaria).
Otra compañía exportadora con problemas manifiestos es el grupo argentino Mattievich, cuya planta en Puerto Gral. San Martín está semiparalizada con 180 trabajadores sin tareas y sin pago de garantía horaria, mientras que una de las dos planta que tiene en la zona de Rosario se encuentra en preventiva de crisis con más de 700 trabajadores con futuro incierto; en tanto, la planta que el grupo posee en Carcarañá despidió a unos 20 empleados y está operando muy por debajo de su capacidad.
En la lista también figura el Frigorífico Sadowa (con quiebra decretada; unos 330 trabajadores sin empleo y con salarios atrasados sin cobrar), Frigorífico Runfo (alrededor de 500 trabajadores con garantía horaria) y Frigorífico General Pico (despidos de personal y reducción de jornada para los sobrevivientes).
Además se incluye a Frigorífico Oro Verde (planta semiparalizada con unos 220 trabajadores con garantía horaria); Frigorífico Lamar (alrededor 50 trabajadores despedidos); Frigorífico Maciel (al menos 15 despidos y reducciones horarias); Frigorífico Rafaela Alimentos (unos 450 trabajadores en garantía horaria); Frigorífico Lafayette (planta sin actividad; unos 80 trabajadores con garantía horaria); Frigolomas (semiparalizado); y las plantas de la familia Gargiulo Frigorífico El Látigo y Frigorífico Macellarius (que está sin operar y con más de 50 trabajadores que no perciben ingresos).
Dirigentes de la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne estiman que son al menos 8000 los trabajadores del sector en situación de riesgo.
Si bien en mayo pasado el gobierno prometió liberar un cupo de 20.000 toneladas mensuales de cortes frescos bovinos, desde entonces los permisos de embarque siguieron liberándose a cuentagotas para finalmente suspenderse la semana pasada.