Según la Secretaría de Agricultura de la Nación, se dio por finalizada la implantación de trigo en toda la provincia de Buenos Aires, con una muy buena evolución.
Sin embargo, indicó que en la región sudoeste, sería necesaria la ocurrencia de lluvias de mayor milimetraje para asegurar una reserva adecuada de humedad en el perfil del suelo.
En Córdoba, en cambio, las precipitaciones producidas a fines de agosto fueron beneficiosas para el cultivo en la mayor parte de las provincias aunque algunas zonas del sudoeste presenta lotes desparejos y con menor desarrollo que el resto.
En Entre Ríos se detectó en algunos lotes la presencia de leves ataques de mancha amarilla, roya y septoria, que por el momento no se están controlando.
En La Pampa, la superficie sembrada disminuyó un 50 % con respecto a la campaña anterior, al igual que el norte de Santa Fe, en donde la escasa humedad además produjo la aparición de algunas enfermedades foliares.
Respecto de la campaña gruesa, en el Chaco y Santiago del Estero, continúa la sequía por lo que la implantación de girasol se encuentra demorada. Se estima que el período de siembra se extenderá hasta fines de septiembre.
Es buena la situación en algunas zonas de Santa Fe y Córdoba. En lo que respecta a maíz, prosiguió la implantación en las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, registrándose un avance de alrededor del 25% de la superficie prevista.
