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El impacto del cierre de fronteras en los chacinados

El cierre preventivo al ingreso de carnes de cerdos de Brasil debido a los brotes de aftosa compromete a la industria argentina de chacinados. La cámara que los aglutina puso de manifiesto en su preocupación.

El cierre preventivo al ingreso de carnes de cerdos de Brasil debido a los brotes de aftosa compromete a la industria argentina de chacinados. La cámara que los aglutina puso de manifiesto en su preocupación.
infocampo
Por Infocampo

Debido a la falta de abastecimiento local de cerdos, la industria de chacinados completa sus requerimientos de materias primas, pulpas de jamón, paleta, bondiola, recortes y tocino importándolos de Brasil.

“A partir del cierre preventivo impuesto por el Senasa al ingreso de carnes de cerdo, susceptible a la fiebre aftosa, la industria de chacinados nacional comienza a desabastecerse de la preciada materia prima”, explican en un trabajo desde la Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Afines (Caicha).

La incógnita es cómo se suplirá la falta. La faena nacional desde el 2001 a la fecha decae. Pero si se observan los precios de los cerdos desde diciembre del 2001 hasta octubre del 2005 se observa una suba permanente.

La leve recuperación de la faena desde el 2004 redunda en un volumen que está muy lejos de sustituir las importaciones históricas.

“Las pulpas de jamón procedentes de Brasil son cortes deshuesados, que ingresaron en promedio entre enero y septiembre del 2005 por alrededor de 750 toneladas mensuales (las pulpas de 65.000 cerdos o sea 40% más de faena”, explican desde la Caicha.

A pesar de un repunte y de un deseo de desarrollo y aplicación de tecnología a la producción, “en el país del maíz no hay cerdos suficientes”, dicen. Y argumentan: “Debemos tomar conciencia del papel que cada operador de la cadena agroindustrial porcina desempeña, y tener mucho cuidado con las medidas que se adoptan”.

Subas. Hoy el precio del cerdo sube semana a semana, pero así como suben los precios internos de materias primas suben los ingresos de fiambres, y productos terminados del Brasil y a precios predatorios para la industria nacional, en principio, y para la producción nacional de cerdos, en definitiva.

Pero si se observan los precios de los cerdos desde diciembre del 2001 a la fecha, se vislumbra una suba permanente, superando incluso, ampliamente, la cotización del dólar: en diciembre del 2001 el cerdo en pie cotizaba a $0,71/kg vivo; hoy el promedio oscila los $2,77/kg vivo, lo que equivale a un incremento de 290 por ciento.

Este aumento en las materias primas fue imposible trasladarlo al producto terminado, y hoy ante el desabastecimiento en puertas, la producción continua presionando con más aumentos de precios y plazos más cortos. En este punto es de destacar que los precios porcinos oficiales corresponden a la semana anterior para el lector; es importante aclararlo ya que se vienen registrando subas de alrededor de 3% semanal.

Créditos

El Ministerio de Asuntos Agrarios de Buenos Aires lanzó ayer el Programa Fuerza Chancho. Consiste en créditos, orientados a la inversión en compra y/o retención de vientres, compra de reproductores machos, implantación de pasturas y verdeos y mejoras en infraestructuras.

El cierre preventivo al ingreso de carnes de cerdos de Brasil debido a los brotes de aftosa compromete a la industria argentina de chacinados. La cámara que los aglutina puso de manifiesto en su preocupación.
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Por Infocampo

Debido a la falta de abastecimiento local de cerdos, la industria de chacinados completa sus requerimientos de materias primas, pulpas de jamón, paleta, bondiola, recortes y tocino importándolos de Brasil.

“A partir del cierre preventivo impuesto por el Senasa al ingreso de carnes de cerdo, susceptible a la fiebre aftosa, la industria de chacinados nacional comienza a desabastecerse de la preciada materia prima”, explican en un trabajo desde la Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Afines (Caicha).

La incógnita es cómo se suplirá la falta. La faena nacional desde el 2001 a la fecha decae. Pero si se observan los precios de los cerdos desde diciembre del 2001 hasta octubre del 2005 se observa una suba permanente.

La leve recuperación de la faena desde el 2004 redunda en un volumen que está muy lejos de sustituir las importaciones históricas.

“Las pulpas de jamón procedentes de Brasil son cortes deshuesados, que ingresaron en promedio entre enero y septiembre del 2005 por alrededor de 750 toneladas mensuales (las pulpas de 65.000 cerdos o sea 40% más de faena”, explican desde la Caicha.

A pesar de un repunte y de un deseo de desarrollo y aplicación de tecnología a la producción, “en el país del maíz no hay cerdos suficientes”, dicen. Y argumentan: “Debemos tomar conciencia del papel que cada operador de la cadena agroindustrial porcina desempeña, y tener mucho cuidado con las medidas que se adoptan”.

Subas. Hoy el precio del cerdo sube semana a semana, pero así como suben los precios internos de materias primas suben los ingresos de fiambres, y productos terminados del Brasil y a precios predatorios para la industria nacional, en principio, y para la producción nacional de cerdos, en definitiva.

Pero si se observan los precios de los cerdos desde diciembre del 2001 a la fecha, se vislumbra una suba permanente, superando incluso, ampliamente, la cotización del dólar: en diciembre del 2001 el cerdo en pie cotizaba a $0,71/kg vivo; hoy el promedio oscila los $2,77/kg vivo, lo que equivale a un incremento de 290 por ciento.

Este aumento en las materias primas fue imposible trasladarlo al producto terminado, y hoy ante el desabastecimiento en puertas, la producción continua presionando con más aumentos de precios y plazos más cortos. En este punto es de destacar que los precios porcinos oficiales corresponden a la semana anterior para el lector; es importante aclararlo ya que se vienen registrando subas de alrededor de 3% semanal.

Créditos

El Ministerio de Asuntos Agrarios de Buenos Aires lanzó ayer el Programa Fuerza Chancho. Consiste en créditos, orientados a la inversión en compra y/o retención de vientres, compra de reproductores machos, implantación de pasturas y verdeos y mejoras en infraestructuras.

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