El 5 de octubre el sorgo se pagó en Rosario 470$/t, mientras que el maíz ese mismo día se vendió entre $370 y $380, unos $100 menos, lo que representa una inversión de la histórica relación entre ambos cereales. Esta brecha en las cotizaciones se mantiene en el mercado local desde fines de agosto, aunque con matices, pero siempre en favor del sorgo.
Distintas variables se combinaron para que se produzca este fenómeno en el mercado local. Una de ellas es que hubo altos porcentajes de brotado en la última cosecha a raíz del temporal de fines de marzo. Esto provocó que parte de la mercadería no alcance los estándares requeridos para la exportación, lo que determinó faltantes, dificultad para conseguir el cereal e incumplimientos en embarques.
“El mercado se recalentó y el problema se siente más cuando llegan los buques a las terminales y no hay volumen suficiente y tienen que salir a comprar”, explicó Carlos Signorelli, jefe Comercial de ACA Rosario.
Por otra parte, hubo otra variable que también entró en juego: la fuerte aparición de Europa en las compras. En las estimaciones del comercio de granos del Foreing Agricultural Service del Usda de septiembre pasado se informó que la Unión Europea compraría 500.000 toneladas más de sorgo, llegando a un récord de 1,50 Mt en las importaciones, mientras que Estados Unidos pasaría de 4 a 4,40 Mt en las exportaciones de este cereal para abastecer la demanda europea de forrajes.
Este renovado interés del mercado internacional, ante la escasez de trigo y maíz en el mundo, también influy en los precios internos.
“Fue prohibido el ingreso a la Comunidad del evento del maíz GA21 argentino (GMO). Por esa razón, Europa descubre un sorgo barato argentino que es mucho más económico que un maíz brasileño que no es GMO. Ahora se está hablando que la UE liberaría la entrada del maíz argentino GMO y esto hace retraer los
compradores de sorgo disponible y más aún de la nueva cosecha. Por eso es que empezaron a desaparecer los compradores de sorgo o bien irán bajando los precios”, describió Ariel Marelli, responsable de Originación de Toepfer, que este año exportó unas 300.000 t, de las 1,06 Mt de las declaradas de ventas al exterior, según datos de la Sagpya.
Según publicó recientemente World Grain, Francia necesitaría importar alrededor de 1 Mt entre sorgo y maíz y estaría buscando cubrir su demanda con la oferta de EEUU, Brasil y la Argentina. Aunque hasta la próxima cosecha del Hemisferio Sur faltan varios meses, con lo cual EEUU queda prácticamente solo en el mercado como proveedor.
“El sorgo se considera competitivo cuando está un 20% más barato que el maíz para poder ingresarlo en las fórmulas de raciones alimenticias forrajeras. La demanda va a estar si comercialmente los números dan para
eso”, sostuvo Marelli, quien remarcó que de poder entrar el maíz argentino al norte de Europa, el sorgo irá bajando a niveles normales de mercado como los ha tenido en el pasado. “Hoy los precios del disponible son más para coberturas por incumplimientos que por precios de nueva cosecha”, destacó.
Alexia Giménez
