Si bien los datos aún son provisorios, indican una mejora en el volumen procesado por la industria frigorífica que había tenido una fuerte caída en el último mes del 2006. Ese mes la faena cayó 17% respecto de noviembre.
La mayor faena de enero se debió, según empresarios del sector, a que durante diciembre, por cuestiones impositivas, los productores postergaron las ventas de su ganado a los efectos de reducir el impacto del Impuesto a las Ganancias. Otro factor que hizo disminuir el volumen fue la intervención del gobierno en el mercado ganadero que condiciona los valores en los que se puede vender la hacienda por lo que se habría generado un efecto de retención del ganado.
Con respecto a la composición de la faena, la participación de las hembras en diciembre llegó a 48%, lo que superaría el umbral crítico de 43%. Según empresarios de la industria frigorífica, ese volumen es alto y estaría reflejando las pocas expectativas de los ganaderos sobre la rentabilidad del negocio. Sin embargo, el promedio anual del 2006 de participación de hembras en la faena, de acuerdo con las estadísticas de la Oncca, fue de 41,6%, inferior al umbral crítico del 43% y todavía menor al promedio del 2005, que fue de 43,2 por ciento.
A su vez, en diciembre se faenaron 145.000 terneras, lo que significó el 14% del total y una suba del 4,5% respecto de noviembre. Esto, indicaron analistas del sector, se debió a que el Gobierno decidió la reducción en el peso de faena que cayó de 300 kilos a 240 kilos y no a una liquidación de vientres. Esta medida permitió que el año pasado se produjeran 3,02 millones de toneladas res con hueso y que la caída en la producción llegara a sólo 3,6% cuando la faena disminuyó 6,5% respecto del 2005.
