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Enrique Martínez: “Los chacareros están muy lejos de la agroindustria”

El titular del Inti plantea que tienen que concebirse como transformadores de las materias primas que producen y que desde el instituto trabajan para inducir ese salto. Siempre polémico, opinó sobre los biocombustibles.

El titular del Inti plantea que tienen que concebirse como transformadores de las materias primas que producen y que desde el instituto trabajan para inducir ese salto. Siempre polémico, opinó sobre los biocombustibles.
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Por Infocampo

De chacareros a partícipes activos de la cadena agroindustrial, ese es el eje sobre el cual están trabajando en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) con el objetivo de involucrar a los productores primarios en el proceso de industrialización de sus productos.

En una entrevista con Infocampo, el titular del Inti, el ingeniero químico Enrique Martínez, habló de la importancia de que los productores dejen de concebirse como meros proveedores de los grandes acopios o exportadores, y comiencen a involucrarse en la cadena productiva como socios y transformadores industriales.

-¿Qué visión tiene el Inti en relación con la agroindustria?

-La producción primaria debe involucrarse en el proceso de industrialización de los productos. Por el contrario, la lógica dominante supone que las producciones primarias están destinadas a los puertos, salvo que sean las grandes empresas quienes emprendan ese camino de agregar valor a las materias primas, como sucede con las aceiteras o molineras. Los productos primarios deberían ser transformados en el ámbito local.

-¿Considera que los productores deberían participar de la industrialización de los cultivos?

-Exacto. Desde la lógica tradicional, los productores trabajan por demanda de los grandes acopiadores, exportadores o industrias. Nunca se han considerado a sí mismos como socios o transformadores industriales. El grueso de los chacareros estaba y está muy lejos de la industria. La lógica que nosotros estamos promoviendo es sustancialmente inversa.

-¿De qué manera está trabajando el Inti para lograr ese objetivo?

-Estamos trabajando en al menos tres direcciones: determinación de iniciativas privadas donde nuestra visión se esté aplicando en forma práctica; inducción de actores a que se animen a dar un salto hacia la industrialización, e identificación de situaciones (en el norte argentino, por ejemplo), donde no hay producciones primarias por falta de una estructura industrial, y si ésta existiera se podrían desarrollar las actividades productivas.

¿Ya avanzaron en la identificación de situaciones espontáneas?

-Sí. En la Pampa Húmeda, por ejemplo, hay algunas pequeñas industrias alimentarias que, en rigor, están peleando contra la concentración propiciada por la cultura y la dinámica política.

-¿De qué forma están induciendo a los productores hacia la industrialización?

-El Inti lanzó, en 2008, un concurso con el objetivo de identificar iniciativas exitosas, o potencialmente exitosas, a las que les faltaba apoyo técnico o económico. Ahora, comenzaremos a asistir a unos 40 proyectos. Pero, debo reconocer como autocrítica, que no se presentaron actores importantes de la agricultura pampeana, sino de áreas periféricas.

¿Ve factible que los industriales empiecen a tomar posiciones como productores?

-Los usuarios de cultivos industriales que han sido desplazados por la soja apelan a ese mecanismo. Las firmas de cerveza contratan cultivos de cebada cervecera, por ejemplo. Bienvenido si eso sucede pero la verdad es que, desde el punto de vista cultural, también me gustaría que se produjera un proceso en la dirección opuesta.

(La entrevista completa puede leerse en Infocampo Semanario)

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