Especialistas de la Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estimaron una superficie de siembra entre soja y maíz de 22,55 millones de hectáreas, una cifra 3% superior a la registrada durante la campaña pasada.
“Se proyectan de 21 a 22 M/toneladas de maíz con una intención de siembra de 3,85 M/hectáreas. Para soja la estimación de producción es de 49,5 M/toneladas sembradas en 18,7 M/hectáreas”, señaló hoy un informe de la BCR.
“La proyección de superficie sembrada de maíz para la campaña 2010/11 ha sido ajustada en 3,85 millones de hectáreas. Subsiste la posibilidad de ajustes posteriores en la medida que se analice la evolución de las labores de siembra de diciembre y enero en Chaco y Santiago del Estero y cómo se den las condiciones para la implantación del maíz de segunda en el norte de Córdoba”, indica el informe.
“Las labores de implantación de maíz han comenzado con excelentes recargas en el suelo, las que permitieron un rápido avance de labores iniciales respecto del ciclo pasado”, señaló la entidad comercial rosarina.
“A partir de los rindes registrados en las últimas 5 campañas, y restando la superficie que se podría destinar a consumo animal, se proyecta al potencial ingreso de maíz al circuito comercial entre 21 a 22 M/toneladas”, agrega el informe.
Por su parte, la BCR manifestó que “la superficie a cubrir con soja podría ascender a 18,7 M/hectáreas, con lo cual podría superar ligeramente a la campaña anterior (18,67 M/hectáreas) y marcaría un nuevo récord”.
“Habría una mayor participación de soja de segunda, respecto del año anterior, lo cual baja las expectativas de rindes y permite trabajar con una producción de 49,5 millones de toneladas. En los primeros días de noviembre se fue produciendo cierto retraso o paralización de la siembra, según los casos, en numerosas áreas de la provincia de Santa Fe, Córdoba y en el norte de Buenos Aires”, añade el documento.
De todas formas, según el informe, en el contexto nacional la siembra de soja comenzó temprano en este año y mantiene una pequeña diferencia a favor respecto del progreso de labores de implantación a la misma fecha del ciclo anterior.
“Se observa un incremento la presencia de plagas en esta área, y la falta de pronósticos ciertos de lluvias para el área núcleo está aumentando las ansiedad de los productores”, concluye.
