En su último informe, el Usda pronosticó que la producción argentina totalizaría 40, M de t, en base a las 15,6 M de has implantadas.
El guarismo representa todo un dato, si se considera que el mercado internacional de la oleaginosa se encuentra presionado por la potencial oferta estadounidense (ya se cosechó el 92% del total sembrado, con una estimación de cosecha de 80,75 M de t) y de los países sudamericanos.
Después de compartir el diagnóstico del USDA, el presidente de ACSOJA, Rodolfo Rossi, anticipó a Infocampo que “los rindes promedio estarían en 26,5 quintales, en una banda que va desde los 24 a los 27,5 qq por ha”.
El dirigente recordó que se registra un importante crecimiento del área implantada (cercano al 6%) y aclaró que la zona núcleo dispone de un buen perfil hídrico para la siembra.
“La situación es diferente en el norte y sudoeste de Córdoba, donde todavía no se pudo iniciar la siembra”, aclaró Rossi, para agregar que “en las zonas más rendidoras, sobre la ruta 8 ó 9 las tareas comenzaron con fuerza”.
Sin embargo, el presidente de ACSOJA disparó un llamado de atención sobre lo que ocurra en enero. Si los pronósticos climáticos se cumplen, este mes será más seco y caluroso que lo normal, lo cual minimizaría la ocurrencia de casos de roya.
“Si se puede hacer una siembra de soja de segunda temprana, la seca de enero no impactará, pero no hay que olvidarse que el inóculo (de la roya) está presente y se registra mayor humedad en Brasil y la zona de la mesopotamia, además de la presencia evidenciada de esporas en soja guacha. Hay que abrir los ojos más que los dos años anteriores”, recomendó.
Volviendo al plano internacional, el USDA previó una producción global de la oleaginosa 2005/06 de 220,87 M de t (contra las 213 M de t de la campaña anterior), mientras que los stocks finales quedarían en 47,41 M de t.
Pero, la realidad indica que la coseha mundial dependerá en gran medido de lo que ocurra en sudamérica: “Brasil registra un importante atraso en la siembra en Mato Grosso y sus productores profundos problemas financieros; y Paraguay empezó bien el año, sobre todo el este, que tiene excelentes condiciones” en sus cultivos, detalló el dirigente, antes de concluir que “podemos ser optimista en cuanto a la siembra del cono sur”.
Oferta, demanda, stocks de EE.UU. y panorama en sudamérica, el obligado camino termina en los precios, “que se van a mantener”, auguró Rossi, no sin antes aclarar que “es un momento difícil para hacer estimaciones”.
Es que la previsible retracción de la demanda por parte de los productores aviares, ante la crisis de la Influenza, se complementaría con un posible incremento de la demanda energética, para la producción de biocombustibles.
“Seguramente, tendremos un incremento de la demanda de soja para biocombustibles por parte de EE.UU. y los países del Mercosur”, concluyó Rossi.
Mosca Blanca
Desde el INTA Paraná se advirtió sobre la presencia de este insecto en lotes de soja. “Si bien nunca se registraron problemas en grandes extensiones, la realidad es que es un insecto difícil, y no hay muchos insecticidas disponibles que lo controlen. En superficies chicas es devastador”, dijo Rossi.
