Con la presencia del gobernador Hermes Binner y del jefe de Gobierno de Rosario, Miguel Lifschitz, dio comienzo el jueves por la mañana el 97° Congreso Anual Ordinario de
Unas 1.500 personas colmaron las instalaciones del centro de convenciones donde se realizó el máximo encuentro de los federados.
Pero lo más esperado en la jornada de inauguración eran las palabras del presidente de la entidad, Eduardo Buzzi. El líder hizo hincapié en la consolidación de la tarea gremial de
Rápido de reflejos, Buzzi aprovechó para hacer notar la presencia del ex ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Emilio Monzó, en el lugar. Monzó, de buena sintonía con el ruralismo, parece estar alejándose del oficialismo y hay quien especula con su unión al peronismo disidente a partir del 10 de diciembre.
También se encontraban presentes diputados electos vinculados al campo, entre ellos el confederado formoseño Ricardo Buryaile. La presencia de Binner no fue un hecho menor.
En la previa, dirigentes de
En un gesto conciliatorio fue el mismo Buzzi quien reconoció que dicho impuesto está atrasado, dado que no se modifica desde 1992.
Por otra parte, la presencia del gobernador en el acto reafirmó el vínculo entre el frente gobernante y el campo, en un momento en que desde el opositor reutemismo cruzan a los socialistas con su apoyo al proyecto kirchnerista de ley de medios.
Respecto del tributo, Buzzi pidió que una modificación del impuesto cuente con un consenso previo y la respectiva discusión parlamentaria, donde el PJ estaría dispuesto a avanzar, como forma de destrabar a su vez un cambio en la coparticipación de los fondos provenientes de las retenciones de la soja.
Binner aprovechó la tribuna para fustigar al kirchnerismo. “No hubo un gobierno nacional que le haya hecho tanto mal al campo como éste”, dijo el gobernador.
En tanto, al cierre de esta edición todo hacía prever que Buzzi vería renovado su mandato al frente de la entidad.
(Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario)