La Unión Europea era el principal comprador de los biocombustibles argentinos; sin embargo, tras las restricciones aplicadas en el viejo continente la Argentina pasó de comercializar 150.000 toneladas promedio en el primer semestre del 2012, a 60.000 promedio en lo que va del 2013.
Opinan sobre esta situación dos referentes del sector. Claudio Molina, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno (Aabh), y Víctor Castro, con igual jerarquía y puesto en la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio).
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