La campaña girasolera avanza con rindes variables. La desuniforme distribución de las lluvias durante el ciclo del cultivo determinó y va a determinar grandes diferencias de rindes en una misma zona, coincidieron productores consultados en el Chaco, La Pampa y sudeste de Buenos Aires.
La superficie nacional cubierta alcanza las 2,45 millones de hectáreas, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura de la Nación (SagpyA), un 8% superior a la campaña anterior, y se lleva cosechado 20% con un rinde promedio de 1.420 kg/ha, indicó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires en su informe publicado el viernes pasado. La estimación nacional es de entre 3,80 y 4,10 millones de toneladas, según la SagpyA. El grueso de cosecha se define hacia fines de este mes.
En el Chaco los mejores rindes se lograron en el departamento de Villa Ángela con 1.300 kg y por estos días se empieza a cosechar los lotes de segunda, que recibieron mayores temperaturas y menores lluvias, por lo cual los productores estimaron un rinde en torno de los 800 kg/ha. La sorpresa de esta campaña fue el ataque de la âmosquita del capítuloâ, un insecto que tiene incidencia en siembras tardías y el cual está en investigación.
En el norte de La Pampa, en la zona de Catriló, a diez días de que comience la cosecha de lotes tempranos, los plantíos se encuentran en general en buenas condiciones, contó a Infocampo Luis Arias, socio de Cazenave y Asoc. âFueron sembrados durante octubre, lo cual es inusual porque generalmente falta humedad, y en este mes recibieron entre 130 y 200 mm. Luego llovió poco, acompañaron algunas precipitaciones en eneroâ. Los girasoles en esta zona promedian un rendimiento de 2.000 kg/ha en condiciones normales. La situación cambia hacia el oeste de la provincia, donde la falta de agua compromete severamente la situación de los cultivos. En el aspecto sanitario, también en La Pampa se detectó este año mayor presencia de la âmosquita del capítuloâ y hubo ataques nuevos de arañuela, âque causaba problemas en soja y no es común en girasolâ, comentó Arias, y agregó que âse detectaron casos de cultivos con verticillium, una enfermedad que provoca la maduración acelerada de la planta y acorta el cicloâ. En la provincia de Buenos Aires, en la zona de Olavarría y Azul se esperan resultados superiores a los 2.000 kg/ha, mientras que en Coronel Suárez, 1.700 kg/ha. En Pringles, donde se siembran unas 45.000 ha, la âsituación es angustiante, se va a perder 40% de la cosecha por falta de aguaâ, describió Jesús María Díaz, presidente de la Asociación de Productores de Coronel Pringles. En un año con buenas lluvias tendrían 1.800 a 2.000 kg/ha, pero hoy, en cambio, están solicitando la prórroga de la declaración de desastre agropecuario (que se había otorgado hasta el 31 de diciembre de 2006) a las autoridades provinciales.
Más área en todo el país
El aumento de superficie en esta temporada, que se calculó en 8% con respecto a la anterior, se debe a la mayor cantidad de hectáreas sembradas en Buenos Aires, Entre Ríos, La Pampa y Santa Fe, que permitieron compensar el descenso de área en Chaco y Santiago del Estero, indicó la Sagpya.
Alexia Gimenez
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