Prinex es una organización de productores exportadores, que engorda 125.000 cabezas de ganado propio de la más alta calidad que volcaban en su totalidad al mercado internacional; de ahora en más las reglas de juego cambiaron.
Después de la suspensión a las exportaciones, Carlos Odriozola, presidente de Prinex, contó a Infocampo: “los importadores no pueden creer las políticas argentinas; Europa se abastecía casi totalmente de nuestra carne y con estas medidas se está perdiendo una oportunidad excepcional para que la Argentina se posicione como abastecedor del mercado europeo”.
Odriozola, también sintetizó el conflicto en una sola frase: “Con las exportaciones cerradas, las empresas también deben cerrar, no queda otra”. El presidente de Prinex explicó además que con esta medida el Gobierno obliga a que los empresarios vuelquen su producción al mercado interno sin saber realmente cómo funciona, lo único que queda ahora son las exportaciones Hilton que sólo representan 6% del peso del animal, una pérdida demasiado grande para sobrellevar.
¿Cómo sigue el negocio para la Limousin?
Carlos Odriozola es también el vice presidente de la Asociación Argentina de Productores de Limousin. El año pasado impulsaron una campaña para que los productores se volcaran al desarrollo de esta raza, y consiguieron un cupo para exportar Hilton abriendo nuevos mercados.
Ahora el panorama es otro. Según Odriozola, todas las acciones que se emprendieron y concretaron el año pasado hoy no sirven de nada.
“Nos dejaron descolocados”, agregó Odriozola, quien también explicó que la raza limousin puede abocarse a producir novillos más chicos para volcarlos al mercado interno pero en realidad ese no era el propósito.
“En este momento todo lo que emprendamos es pan para hoy y hambre para mañana”, sintetizó el empresario, al tiempo que agregó que hasta que no haya una política ganadera “seria” y que fomente el negocio, es muy difícil proyectar a futuro, sólo resta esperar y subsistir con estas reglas de juego.
