El proyecto con el cuál se crearan macetas, platos, vasos y cubiertos biodegradables a bajo costo, busca reducir la inmensa producción de plástico anual que contamina ríos, mares y océanos.
Este biopolímero está elaborado con almidón de avena y compuestos antimicrobianos que cumplen funciones como barrera protectora contra la humedad, evita perdida de compuestos volátiles y retrasa la oxidación enzimática
Investigadores argentinos lograron producir plásticos biodegradables, a partir de uno de los principales desechos de la cadena láctea.
Auravant, que cuenta con más de 6 millones de hectáreas y más de 15.600 usuarios en el mundo, lanzó nuevas funcionalidades.