En el marco del congreso A todo trigo, que se realiza hasta hoy en el Hotel Sheraton de Mar del Plata, y de cara a la campaña que comienza en apenas semanas, los máximos exponentes del sector explicaron por qué este año hay que apostar fuertemente al cereal, que se posicionó en el primer lugar en materia de negocios a partir de los cambios en las políticas que introdujo el Gobierno Nacional, tales como la eliminación de las retenciones y la liberación del mercado para la exportación. Con un escenario óptimo para la inversión y el desafío de alcanzar un mayor volumen de producción, analistas, funcionarios y productores sueñan con expandir el comercio internacional y reinsertar a la Argentina en el mundo.
Según el analista Gustavo López, de Agritrend, durante el ciclo 2016/2017 el área de trigo estará en torno a las 4,8 millones de hectáreas, frente a las 3,4 millones de la campaña anterior; mientras que la producción pasará de 10.300 millones de toneladas a 15.300 millones, lo que se traduce en una recuperación de alrededor del 50%. En tanto, López aseguró que, luego de exportar entre 1,8 y 2 millones de toneladas en el ciclo previo, “hoy las proyecciones del USDA anticipan una recomposición de hasta las 8 millones de toneladas en 2025, que incluso se podrían superar”. “El trigo mundial 2016/7 se presenta con una disminución del 3% del área sembrada y la reducción se da en oferentes exportadores que no son Canadá, Australia ni Argentina. Además, hay ajustes en los stocks finales que hacen pensar en precios relativamente sostenidos”, explicó el especialista durante su discurso. Para López, las compras se sostendrán, y con precios interesantes. “Las posiciones del trigo nuevo en el MATba se ubican en torno a los 165 ó 170 dólares por tonelada, valores que se hacen más atractivos en un mercado libre, porque hasta hace apenas un año pensábamos si podríamos venderlo”, sostuvo, en referencia a las trabas que impuso durante su gestión el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno.
Brasil y otros mercados
En un panel que disertó sobre el retorno de las relaciones con el país carioca – principal comprador de trigo de la Argentina-, Conrado Mariotti Neto y Denise de Oliveira Resende, de Abitrigo, hicieron hincapié en la necesidad de maximizar la calidad y controlar los residuos de agroquímicos, dos requisitos primordiales a la hora de concretar negocios. “La sugerencia es la evaluación conjunta para encontrar soluciones, ya sea dentro del Mercosur o en las reuniones bilaterales”, recomendaron.
Por su parte, el asesor de la Federación de Acopiadores de Cereales, Leandro Pierbattisti, se mostró muy optimista con respecto a la conquista de nuevos mercados. “Es lo más simple que hay”, dijo, al tiempo que subrayó la importancia de “cumplir con las condiciones acordadas” y aprovechar la proximidad geográfica. “Tenemos en Sudamérica esa gran posibilidad con un mercado de unos 14 millones de toneladas y sólo 5 países oferentes; pero si nos metemos en el norte de África deberemos competir con 18 vendedores”, se atajó, aunque aclaró que “seguir privilegiando Sudamérica sería un suicidio”.
A favor de los productores
“El sector productivo es el que puede dar respuestas más rápidas para que este país se ponga de pie de nuevo tras la década perdida”, aseguró el subsecretario de Mercados Agropecuarios, Jesús Silveyra. Para el funcionario “es mentira que la suba de los combustibles se chupó la baja de las retenciones y las ROEs, ya que los costos no subieron un 100%”. De todos modos, remarcó que el Gobierno está dispuesto a escuchar las problemáticas que se presenten. “La obligación del Estado es ser justo para conciliar los intereses contrapuestos”, expresó.
En tanto, para Luis Urriza, subsecretario de Agricultura, este es “un momento histórico, dado que seguro que produciremos más trigo y quedarán millones de toneladas para exportar”. “El Gobierno se hará cargo de las decisiones que se tomen, pero primero habrá que analizar la posición de todos los sectores, pensando juntos como un país y a mediano plazo”, agregó.
Financiación
El interés más fuerte está puesto en la provincia de Buenos Aires, tanto de parte del Ministerio de Agroindustria bonaerense como desde la Nación. Por eso, el Banco Provincia no quiso perderse el evento y se hizo presente a través de Rubén Gonzalez Ocantos, gerente de la Banca Agropecuaria. “Tratamos de brindarle al productor las mejores herramientas posibles, en un momento en donde las tasas de interés son muy elevadas. Podría haber financiamiento en pesos, pero tal vez para la próxima campaña, por eso mi incógnita es si el sector productivo se va a acercar a tomar financiamiento en dólares”, dijo.
El interés más fuerte está puesto en la provincia de Buenos Aires, tanto de parte del Ministerio de Agroindustria bonaerense como desde la Nación. Por eso, el Banco Provincia no quiso perderse el evento y se hizo presente a través de Rubén Gonzalez Ocantos, gerente de la Banca Agropecuaria. “Tratamos de brindarle al productor las mejores herramientas posibles, en un momento en donde las tasas de interés son muy elevadas. Podría haber financiamiento en pesos, pero tal vez para la próxima campaña, por eso mi incógnita es si el sector productivo se va a acercar a tomar financiamiento en dólares”, dijo.
En esta oportunidad, el banco brindará una tasa anual de 4,5 “con posibilidad de financiar todo el ciclo productivo, que puede llegar a ser de hasta un año, en conjunto con el sistema de las tarjetas agropecuarias, en nuestro caso particular mediante Procampo, que contará con dos o tres alternativas de financiamiento”, remarcó Gonzalez Ocantos.
El Gobierno presente
El ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, y su par bonaerense, Leonardo Sarquís, abrieron A Todo Trigo ayer, con discursos que acentuaron el rol que tomó el Ejecutivo en relación a las problemáticas que arrastraba el sector desde hacía mucho tiempo. “Hace menos de un año tenían un dólar por trigo de 7 pesos y hoy está en 15 pesos”, recordó. “Cumplimos con los compromisos de eliminar las restricciones al trigo, sabemos cuáles son las necesidades de los productores, y aquí estamos para ayudarlos”, dijo. En ese sentido, el ministro afirmó que “el sector va a invertir más de 12 mil millones de dólares. Nuestra confianza está depositada en el agro porque es el motor económico y social de la Argentina. Hoy, el campo representa el 8% del PBI. Es imposible olvidarlo”.
“Argentina ha vuelto hace cinco meses a los mercados internacionales, hemos recuperado con el trigo países como Vietnam, Indonesia, Egipto, y queremos decirles que desde la Secretaría de Mercados haremos el esfuerzo de colocar las 16 millones de toneladas de trigo en el exterior y también en el plano interno”, aseguró Buryaile.
Finalmente, Sarquís dejó en claro que su entusiasmo al expresar que “ahora que la urea está más barata, es el momento en que podemos fertilizar mejor para generar calidad y vender nuestro cereal”. “El mundo sabe que hacemos alimentos de calidad. Tenemos que ir a vendérselos”, concluyó.
