La suba en el precio de la hacienda destinada al consumo representó un alivio para los corrales de encierre. De acuerdo a la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), los ingresos a los establecimientos crecieron en casi un 2% y sobre todo, se empezó a revertir la tendencia negativa en los márgenes rentables de la actividad.
Al 1° de febrero, la ocupación alcanzó un 63,1%, un 1,7% más en relación al mismo mes del año pasado.
En medio de una seca que todavía no cede y que adelantó la salida de animales livianos de los campos, la suba en las cotizaciones del Mercado Agroganadero de Cañuelas comenzó a marcar una leve mejora en los números del negocio.
PANORAMA DEL ENGORDE
“Se achicó la pérdida, había un atraso del 48% en el valor de la hacienda”, reconoció Fernando Storni, presidente de la CAF. En diálogo con Infocampo, explicó que si bien no llegan a cubrirse todos los gastos, con los nuevos valores de la hacienda la ecuación comenzó a emparejarse.
En el primer trimestre del año, el llenado de los corrales suele decaer, por una cuestión estacional, pero la seca elevó los ingresos en los feedlots. Un dato que surge del relevamiento es que las firmas de gran escala (más de 10.000 cabezas) representan el 74% del encierre de los establecimientos nucleados en la entidad.
“Se trata de empresas grandes, que han podido absorber pérdidas económicas”, consideró Storni. En los últimos informes, las pérdidas por cabeza engordaba -incluyendo costos productivos y financieras- arrojaba un rojo superior a los $40.000, que ahora retrocedió a $30.000
EL COSTO DE LA INVERNADA
En paralelo, la suba del gordo permitió una recuperación en los valores de la invernada, situación que se percibe en los feedlots. Al analizar la estructura de costos elaborada por la entidad, en noviembre del año pasado la invernada representaba un 55% del total, porcentaje que en febrero trepó al 58%.
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En estos meses, la incidencia del costo de alimentación se mantuvo en 35,6% y además cayó la participación de otros rubros. Con respecto a los valores de equilibrio para la invernada y el gordo, consideró que sin contar el costo financiero, estas categorías deberían cotizar $450 y $471, respectivamente.
Para los feedloteros, todavía queda algo de espacio para un nuevo reacomodamiento en las cotizaciones de la hacienda. “El atraso todavía sigue, cuando se dan estas subas abruptas luego viene un amesetamiento y después puede subir un poco mas”, consideró.
