Los valores de los reproductores Angus y Hereford, las razas bovinas mas extendidas en la región pampeana argentina, batieron todos los récords en la 121 Exposición Rural de Palermo. En la subasta de Aberdeen Angus se pagaron $ 84.000 por el 50% del box 777 (Campeón dos años mayor), mientras que el reservado Campeón dos años menor de Polled Hereford fue vendido en $ 122.000.
El ejemplar Campeón con más de dos años de edad de Aberdenn Angus fue adquirido por la cabaña Don Panos, del Grupo Eurnekian. El animal pertenece a la cabaña Santa Marta, ubicada en la localidad de Lobería, provincia de Buenos Aires.
“Somos cinco personas los propietarios del animal que resultó ganador y decidimos vender un 10% cada uno”, dijo hoy a Infocampo Alejandro Cinque, uno de los dueños del Aberdenn Angus que resultó valuado en $ 168.000 ayer. Los restantes socios son Gilardi, Blanco Villegas, Terragarba y El Chañar.
“El precio pagado ayer superó todas nuestras expectativas si pensamos que el año pasado vendimos un animal similar en $ 90.000”, indicó Cinque, para luego agregar que “estamos muy conformes porque los remates de esta exposición fueron, en general, muy flojos”.
Por otra parte, el precio máximo pagado por la raza Polled Hereford ($ 122.000) también experimentó otro récord ayer en Palermo. El animal pertenecía a Compañía La Legua S.A, Cantarelli Pérez Bustos Ricardo, La Saudade SCA, La Cassina, Vila Moret Carlos, Fernando Castillo, Juan Carlos Maas, Susana Gennari de Bustelo y Gómez y Ciccone. No se pudo identificar al comprador del ejemplar.
En tanto, el criador Gabriel Romero logró alzarse ayer en la Rural con el premio de Gran Campeón Macho de Hereford. Pero a diferencia del ganador de Aberdenn Angus, Romero decidió no vender el animal.
“Extrayendo y vendiendo el semen del animal se pueden obtener mayores ganancias que poniendo a la venta un porcentaje del toro”, explicó a Infocampo Gabriel Romero, propietario del Hereford ganador en Palermo.
“Los que quieran acceder al toro lo van a poder hacer a través de la compra de semen”, señaló Romero. “Tenía muchos amigos que querían comprarlo, entonces decidí no venderlo para no quedar mal con nadie”, agregó, diplomático, Romero.
