“Sin dudas, si no llueve, sopla viento norte y hace mucho calor durante el verano vamos a tener falta de agua”, afirmó Olaizola en declaraciones a la prensa local
El gerente regional de ABSA sostuvo que un bahiense en promedio consume 700 litros de agua por día, aunque ese número incluye las “pérdidas en redes y las conexiones sin registrar”. Según Olaizola, “en verano la demanda es superior a la capacidad de transporte o producción por lo que hemos iniciado acciones para contar con la mayor cantidad de agua posible”.
“Fuera de los picos de verano, tenemos un excedente pero cuando empieza el calor entramos en un déficit muy difícil de cuantificar, sabemos que no hay agua pero no cuánto necesitamos”, agregó. Asimismo, dijo que ante la escasez de agua que se avecina se realizarán modificaciones a bombas sobre una toma del arroyo Napostá que recorre la ciudad, controles en la reparación de las válvulas de los conductos troncales de distribución y se efectuará una campaña para el uso racional del agua. ( Télam )
