En 2009, con productores ganaderos que se encontraban en un escenario de precios planchados y una marcada sequía, era frecuente escuchar que “quienes hicieran bien los deberes” estarían mejor ubicados cuando la actividad comenzara a retomar su pulso habitual.
Si bien algunos jugadores quedaron fuera del negocio, o terminaron de orientar sus planteos hacia la agricultura, otros productores pudieron apostar al manejo eficiente y promedian 2010 con campos en mejores condiciones, vientres que levantaron su estado corporal y una buena producción de invernada.
En “La Escondida”, un establecimiento ganadero ubicado en la localidad bonaerense de General Alvear, esta frase se hizo realidad.
En 700 de sus 1.040 hectáreas lleva a cabo un esquema de cría e invernada con base en sorgos diferidos y verdeos bianuales, que cerrará este ciclo con una producción de carne que alcanzará los 600 kg/ha/año.
Esta superficie está dividida en 150 ha de campo natural y 550 ha destinada para verdeos.
El plantel bovino está compuesto por una base de 600 vientres, distribuidos en tres rodeos.
La producción en el esquema de cría se ubica sobre los 250 kg/ha/año, mientras que en invernada asciende a 600 kg/ha, con una carga de 3,5 terneros/ha.
El Ing. Agr. Rodolfo Nougués, administrador del establecimiento y presidente del grupo Crea Arroyo Las Flores, definió de un solo trazo la línea a seguir: “El objetivo es maximizar el margen bruto por hectárea de la empresa. Voy a introducir al sistema todos los terneros que entren”.
La empresa mencionada por el administrador suma al campo de Alvear dos establecimientos en Tapalqué y 25 de Mayo, que completan una superficie total de 3.000 ha, de las cuales 1.900 están volcadas a la ganadería, con un rodeo total de 1.450 vientres y 1.100 bovinos de invernada.
La foto actual de La Escondida es impecable: pasturas tapizadas de verdeos, un campo de invernada con elevada carga por hectárea y una gran disponibilidad forrajera.
Una de las llaves que permitió pasar -en un período de ocho años- de un campo de pajonales con poca perspectiva ganadera a una invernada de 600 kilos de producción, sustentada en 8.000 kg/ha de materia seca fueron los diferidos.
Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario

