La AFIP inició ayer un megaoperativo de control de las existencias de la oleaginosa en campos y acopios de todo el país. El objetivo es corroborar que el stock que tienen registrado efectivamente esté en los silos y ejercer presión para que vendan y así poder recaudar en concepto de retenciones.
La soja remanente de la cosecha pasada oscila entre 1 y 1,2 millón de toneladas, según las estimaciones, por lo que representaría, al precio del cierre de ayer del mercado de Chicago, ingresos por u$s 645,4 millones de los cuales el Fisco se queda con el 35%.
Según pudo confirmar El Cronista, inspectores de la AFIP llegaron ayer en forma sorpresiva como suelen hacer a varios acopios de la provincia de Buenos Aires con la orden de revisar la soja disponible. Según informó el titular de uno de esos acopios, el inspector le explicó que había sido una orden de la Presidenta y que tenía una larga lista de acopios para visitar en los próximos días. Fueron consultados acopios de San Antonio de Areco, Capitán Sarmiento y Arrecifes y varios confirmaron que habían recibido la visita de los inspectores de la AFIP.
El lanzamiento del megaoperativo también fue confirmado por fuentes oficiales, que explicaron que el plan para realizar un inventario de la soja disponible comenzó ayer y se extenderá, de manera masiva, durante los próximos 15 días. Si bien el organismo que dirige Ricardo Echegaray suele realizar este tipo de inspecciones una vez al año, en esta oportunidad la avanzada es mucho más exhaustiva, ya que están apelando a una multiplicidad de métodos para lograr el cometido.

