El miércoles pasado en horas de la tarde un camión que transportaba una enorme pulverizadora de color amarillo fue asaltado en plena ciudad de Buenos Aires. El hecho ocurrió un día después del cierre de la tradicional feria de la Rural de Palermo.
Dos días después (el viernes) la pulverizadora propiedad de la empresa PLA fue recuperada por la Policía Federal en un galpón situado en la localidad bonaerense de Quilmes. Tres personas fueron detenidas por el robo y se informó que la intención era trasladar la máquina a Jesús María, Córdoba, donde aparentemente tenían un comprador.
¿Cómo pudo suceder un robo de tales características a plena luz del día en una avenida tan transitada de Buenos Aires? “Una camioneta se atravesó inesperadamente en el camino del camión que trasladaba la pulverizadora; los asaltantes bajaron armados y neutralizaron al chófer”, comentó hoy a Infocampo Marcelo Cavaglia, gerente de Comunicación del Grupo PLA.
“El conductor del camión fue secuestrado por los asaltantes, que lo tuvieron cautivo durante cuatro horas, para después liberarlo en La Matanza: todo esto se hizo mientras realizaban todos los operativos para trasladar la pulverizadora”, agregó Cavaglia.
La pulverizadora PLA MAP II 3250 tiene 8 metros de largo, 4 metros de alto y pesa más de 6 toneladas. Y es de un color amarillo furioso. Todo esto no bastó para disuadir a los “piratas del asfalto”, quienes decidieron llevar a cabo el robo en plena ciudad de Buenos Aires.
No es la primera vez que sucedió un hecho similar en el marco de la exposición rural de Palermo. En 2007 un carretón con dos tractores de la empresa Valtra fue robado también a plena luz del día y en el centro porteño. Los tractores fueron recuperados posteriormente.
