A la fecha se implantó a nivel nacional alrededor del 38% del área estimada de trigo 2008/09, equivalente a 1,82 M/ha sobre un total previsto de 4,80 M/ha, aunque la cifra final podría ser inferior si en las próximas tres semanas continúan presentes las restricciones hídricas en muchas zonas trigueras.
‘Resulta perentorio un aporte de agua en el corto plazo habida cuenta que la ventana de siembra óptima se ha acortado significativamente’, indicó el último informe de evolución de cultivos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. ‘Un clima poco amigable determinaría una reducción mayor a la ya exigua proyección de 4,80 M/ha’, añadió.
‘No es ajena tampoco a esta situación el costo de los fertilizantes y la dificultad que implica el reemplazo de variedades de ciclo largo (imposibilitadas de usar por la sequía) por intermedias y cortas’, apuntó el informe.
La única zona en la cual se cumplió la totalidad de la siembra prevista es el NOA con una extensión cubierta de 386.000 hectáreas, seguida por el centro y norte de Córdoba con un 70% de la previsión (204.400 hectáreas).
Las regiones con mayores retrasos en las implantaciones son el NEA con una siembra de apenas el 10% de lo previsto (7800 sobre 78.000 hectáreas); sudeste de Buenos Aires con un 15% (196.500 hectáreas sobre 1,31 M/ha); el centro de Buenos Aires con el 20% (39.000 sobre 195.000 hectáreas); y el sector sur de la región núcleo agrícola (73.400 sobre 367.000 hectáreas previstas inicialmente).
