Como lo anticipó Infocampo, la intención de siembra se reduciría unas 280.000 hectáreas respecto de la anterior proyección, que había sido de 5,98 M.
Al 9 de junio se implantaron 1,08 millón de hectáreas, cubriendo 18,9% del total estimado. El humedecimiento superficial en las zonas favorecidas permitió restablecer las siembras y lograr un avance de 5,6 puntos porcentuales en los últimos 7 días. Esto significó un adelanto de 1,7% respecto de igual fecha del año pasado.
En cuanto a la soja, la cosecha local produjo hasta el 9 de junio un estimado de 40,44 millones de toneladas, producto de la recolección de 99,1 % de la superficie.
De acuerdo con la Bolsa de Cereales, aún quedan en pie unas 140.000 hectáreas, distribuidas mayoritariamente en las provincias norteñas de Chaco y Santiago del Estero.
A nivel nacional, si bien los rendimientos evidencian una ligera disminución, pasando de una semana a otra de 26,6 a 26,5 qq/ha, la cosecha de los plantíos pendientes “determinará un rinde final estimado en 26,4 quintales”, por lo que la cosecha total sumaría unos 40.750.000 toneladas, agregó la Bolsa de Cereales.
Para el maíz y habiéndose recolectado al 9 de junio 87,7% de la superficie dedicada a la producción de grano comercial (con un atraso de 5,8 puntos con relación a similar fecha del año anterior), la entidad proyectó una producción nacional de 14,4 millones de toneladas.
En números absolutos se recogieron 1,93 M de hectáreas, que con un rinde de 64,7 qq/ha produjeron un acumulado a la fecha de 12,5 millones de toneladas, 33,5% menos que lo logrado en la misma fecha del año anterior, “evidenciando el efecto que tuvo en la campaña actual la menor extensión sembrada y el deterioro de los rindes causado por las malas condiciones ambientales”.
