La recaudación por derechos de exportación en agosto pasado fue de 3795,7 millones de pesos (M/$), una cifra 15% inferior a la registrada en julio de 2010 pero 68% superior a la de agosto de 2009, según datos oficiales.
La desaceleración de los ingresos tributarios por retenciones ‘que venían registrando niveles récord en los últimos meses’ se dio de la mano de una caída en la declaración de embarques con pago de retenciones anticipadas (ROEs 180 y 365). Dicha caída obedece en parte a los escasos permisos de embarques de cereales liberados por el gobierno nacional el mes pasado.
En septiembre de 2008 el gobierno dispuso un régimen optativo por medio del cual se determinó que aquellos exportadores que paguen retenciones por adelantado tendrían un plazo de 180 días para concretar embarques de commodities agrícolas una vez que éstos hayan sido autorizado por la Oncca (resolución conjunta 2488/08 y 3714/08 de la Afip y la Oncca). Y en octubre de 2009 se amplió a 365 días el plazo de embarque en el caso de las solicitudes de registro de trigo y maíz (resolución 7552/09 de la Oncca).
En cambio, si el exportador decide pagar retenciones al momento de liquidar la operación, tiene un plazo de apenas 45 días para efectivizar la salida de la mercadería (contados también a partir de la autorización de la operación por parte de la Oncca).
Durante el mes de agosto de 2010 se aprobaron embarques por 3,79 millones de toneladas de commodities agrícolas con pago de retenciones por adelantado. Se trata del tercer volumen mensual más bajo registrado desde enero pasado (ver gráfico).
De esta manera, en agosto pasado la Oncca autorizó exportaciones por 109.252 toneladas de maíz y 598.276 toneladas de trigo con un ROE de 365 días, mientras que con un ROE 180 se registraron ventas externas de 1,07 millones de toneladas de harina/pellets de soja; 178.000 toneladas de poroto de soja; 147.000 toneladas de aceite de soja; 367.800 de sorgo; 225.000 de cebada; y 17.633 toneladas de harina de trigo, entre otros productos.
El cobro anticipado permite mejorar los ingresos por retenciones en lo inmediato, pero a costa de restringir ingresos futuros, dado que en condiciones normales la liquidación del impuesto realizada por los traders debería efectuarse al momento de concretar el embarque y no cuando se registra la operación.
Pero esa metodología no es gratuita: tiene un costo financiero que las compañías exportadoras intentan por lo general trasladar al productor.

