“Reiteramos la urgente necesidad de conformar una mesa de diálogo y debate, sin exclusiones y al más alto nivel político, técnico e intelectual, que permita determinar con certeza el rumbo económico y social de la Argentina agropecuaria que el país requiere, acorde con los intereses del conjunto de la sociedad”, dijo la entindad en un comunicado.
Además remarcó que rechazan “la sumatoria de errores instrumentales, medidas desarticuladas y análisis estrambóticos que pueden conducirnos a un nuevo proceso de desarraigo y éxodo rural como el sufrido por decenas de miles de productores agropecuarios durante la ominosa década de los 90”.
“Insistimos ante las autoridades de Gobierno que se requiere imperiosamente el diseño de un proyecto de mediano y largo plazo donde la figura de la pequeña y mediana empresa rural sea el eje del desarrollo agropecuario nacional, y que permita evitar la vulnerabilidad social, ecológica y productiva, riesgo implícito en la actual situación del campo”
Por último advirtió que sin rectificaciones, el cúmulo de procedimientos y medidas aisladas, discriminatorias e inconsultas dará lugar a :
1- Fortalecer posturas radicalizadas.
2- Concentrar la tierra y la economía
3- Potenciar una creciente e indiscriminada presión fiscal sobre el sector.
4- Favorecer una situación donde los más fuertes y concentrados de las cadenas agroalimentarias, los grandes proveedores de insumos estratégicos para el agro y los poderosos oligopolios formadores de precios, impongan altísimos costos al productor y eternicen transferencias que, a su antojo, restan buena parte de la rentabilidad de los que producen y diluyen sin alternativas el poder de compra del salario de los que consumen.
