Publicidad Cerrar X

En el Día del Perro, las claves para entender la “humanización del mejor amigo del hombre”

Desde la época de las cavernas entabló una relación estrecha con los humanos. Hoy, viajan en avión, tienen su spa personalizado y son parte de la familia.

infocampo
Por Infocampo

Este miércoles se celebra el Día Nacional del Perro en conmemoración a “Chonino“, un perro policía que falleció el 2 de junio de 1983 en medio de un procedimiento. Pero… ¿Qué pasó para que este animal sea catalogado como el “mejor amigo del hombre”, que cumpla servicios sociales y hasta que forme parte de la familia?

La historia de la “humanización” de los perros comienza en la época de las cavernas con el primer intento por domesticar a los perros salvajes. Obviamente esto no era algo altruista, sino que tenía por objetivo una nueva función para los canes: ser animales de caza.

Desde ese entonces hasta la actualidad, los perros han ido adoptando todo tipo de propósitos humanos que van desde ser mascotas mimadas y adoradas al punto de ser parte de la familia, compañeros para personas con algún tipo de discapacidad, presentarse al servicio de las fuerzas policiales, y hasta detectar Covid-19 positivo con un par de olfateadas.

Vea también – ENTRENAN PERROS PARA QUE DETECTEN HUMANOS CON COVID-19 POSITIVO

Para José Salgado, médico veterinario, “en un principio, el perro tuvo el propósito de servir para cazar. A lo largo de este proceso de domesticación, después se dio paso a la utilidad del perro en el trabajo y eso lo fue llevando a un proceso de convivencia mucho más cercana”.

perros policiaLos perros tienen una característica muy particular, poseen 300 millones de receptores olfativos, cuando los humanos tenemos tan sólo 6 millones. Esto ha generado que los canes integran las fuerzas especiales policiales de casi todo el mundo, sobre todo las anti narcotráficos, más allá de la valoración que podemos llegar a tener sobre este ejemplo.

En Argentina, así como en muchos otros países, los perros desempeñan un rol fundamental en el desarrollo de niños con capacidades especiales, así como acompañando adultos de esta población. Un ejemplo es la ONG “Bocalán Argentina” que desde hace más de una década se dedican a la cría y enseñanza de animales para la intervención asistida.

Vea también – REALIZARON LA 7ª ENTREGA DE PERROS DE ASISTENCIA A CINCO NIÑOS CON AUTISMO

border collie tEn la ganadería es imposible no hablar de los perros, y sobre todo de los Border Collie, la raza “pastora” por excelencia con la que trabajan pie a pata cientos de productores argentinos, sobre todo los del sector ovino en la Patagonia.

Esta raza de perros ayuda a maximizar el trabajo en el campo y reducir el estrés en la hacienda, dado que es un depredador natural, el rodeo responde de manera “natural” ante su presencia. Pero esto es en los casos de arriar ganado, cuando también se los utiliza en muchos casos para que convivan con el resto de los animales para evitar así la llegada de otro depredador natural, como puede ser un zorro.

Vea también – ¿CÓMO SE ENTRENAN A LOS PERROS ARRIEROS PARA TRABAJAR EN EL CAMPO?

Yendo al corazón de la familia, los perros son conocidos como “el mejor amigo del hombre”, y la humanización dio lugar a términos nuevos como “perrhijo“.

Para Salgado, lo que hoy vemos en la Argentina “es un fenómeno global que comenzó en sociedades económicamente más desarrolladas y tal vez más evolucionadas en el cuidado animal y hasta se humaniza al gato, cerdos y caballos”, que según explica responde simplemente a la necesidad de los humanos de dar amor y recibirlo.

Pero agrega un dato aún más interesante: “Esa necesidad fue potenciada por los milenials, que vinieron a exaltar estos valores justificados por el hecho de maternidades/paternidades más tardías. Por su necesidad de vivir solos desde más temprana edad, pero a la vez con la idea y la necesidad de sentirse acompañados”.

En esta foto podemos ver un excelente exponente de “perrhijo” para entender el concepto:

perrhijos

Fernanda Serralta, de Médica Veterinaria (MP 14644) opina al respecto que “las personas invierten cada vez más tiempo y recursos en sus mascotas. Desde llevarlas de paseo (incluso de vacaciones), hasta comprarles ropa, juguetes o snacks. Se preocupan por su salud tanto física como emocional, y este es uno de los puntos más importantes y positivos a destacar. Existe un claro vínculo humano-animal, que se traduce en un orgullo emocional y un fuerte sentido de responsabilidad que conlleva la tenencia de mascotas”.

Pero no todo es color de rosas para nuestros amigos de cuatro patas. ¿Por qué? Porque según advierte Sandra Rivadulla, médica veterinaria (MN 6432), puede ser peligroso de asignarles demasiados atributos humanos a nuestros perros.

Existen joyas de marcas internacionales, juegos interactivos, música para su descanso y relax, ropa de diseño, perfumes, tinturas para el pelo, esmaltes para uñas y las cosas más increíbles que uno pueda imaginar. Por supuesto que no todas son aptas para su salud y, en mi opinión, algunas de ellas alejadas del respeto y la ética hacia los nuestros tan fieles compañeros”, detalla Sandra.

Uno de los problemas asociados a esta “humanización” puede ser la alimentación del perro. “Sabemos que las necesidades de los animales son diferentes, principalmente las nutricionales y por eso resulta tan importante entender esta diferencia. No hay dudas de que las mascotas son seres muy especiales para nosotros y es importante brindarles cuidado y cariño, pero no significa que debamos considerarlos pares”, explica Rivadulla.

Quien coincide con este punto es Nicolás José Carmona (MP 13246), etólogo clínico y especialista en Bienestar Animal. “Humanizar y tratar de explicar el comportamiento de otra especie en términos de la nuestra puede generar muchos problemas. ¿Por qué tenemos esa necesidad de todo querer volverlo humano? ¿Por qué todo tiene que ser como nosotros? Creo que ese concepto antropocentrista (nosotros somos el centro del universo) tiene que evolucionar”, afirma.

De todas formas, la humanización de los canes trajo aparejado ciertos beneficios para los animales, y uno de los principales es que según estudios la longevidad ha aumentado un 25% en los últimos 25 a 30 años.

En los años 70, no tan alejado a nuestros tiempos, los perros vivían a la intemperie. No eran comunes las visitas a los veterinarios ni las vacunaciones. Los baños sanitarios eran casi inexistentes. La comida que ellos ingerían era una verdadera calamidad, desde sobras hasta alimentos totalmente desbalanceados cocinados en el hogar. Hoy, gracias al avance en la nutrición y las ciencias veterinarias en general, y a la conciencia que las personas fuimos tomando de la importancia en la salud de nuestros perros”, finaliza la doctora Rivadulla.

*Esta nota fue realizada con el aporte de la Cámara Argentina de Empresas de Nutrición Animal  (CAENA)