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Frigoríficos avícolas advierten sobre un enfriamiento de la actividad

Los importadores liquidan stocks para no seguir perdiendo ante la baja y dilatan nuevas compras. "El primer semestre será difícil", dijo Roberto Domenech de CEPA.

Los importadores liquidan stocks para no seguir perdiendo ante la baja y dilatan nuevas compras. "El primer semestre será difícil", dijo Roberto Domenech de CEPA.
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Por Infocampo

El presidente del Centro de Empresas Procesadora Avícolas (Cepa), Roberto Domenech, manifestó que ‘este ha sido un buen año para el sector, con un fuerte crecimiento en las exportaciones’, pero aseveró que ‘hay un antes y un después de octubre’.

Asimismo, aseguró que ‘estamos atravesando dos meses muy duros, ya que generalmente las ventas a los mercados internacionales se hacen con entre tres y cuatro meses de anticipación, y hoy no podemos cerrar las ventas de enero 2009’.

Sin embargo, destacó el buen nivel de exportaciones con que culmina el año el sector avícola ‘debido al arrastre del panorama mundial previo a octubre’, enfatizó.

Los números mostrados por Doménech en la reunión de fin de año con la prensa muestran que 2008 cerrará con buenos indicadores:

1) La faena fiscalizada por el Senasa asciende a 541 millones de cabezas, contra 489 millones de 2007.

2) Consecuentemente, la producción de productos avícolas trepa a 1,44 millón de toneladas, versus 1,34 del año precedente.

3) El consumo interno (aparente) sigue creciendo y se ubica en 30,8 kg por habitante y por año, cuando en 2003 era de apenas 20 kg.

4) Las exportaciones ascenderán a 280.000 toneladas, versus 210.000 en 2007.

Si bien los números son consistentes con el crecimiento de la actividad, Doménech planteó luces amarillas en el futuro cercano de la industria. En lo inmediato (diciembre), zafan por el pico de consumo estacional vinculado a la fiestas.

Pero la industria estaba preparándose para un crecimiento del 8% en 2009, y ahora el viento rotó y sopla de proa, descolocando los planes.

Una de las cuestiones que remarcó el presidente de Cepa es que los importadores están estoqueados y tratan de deshacerse de la mercadería que compraron antes de que el precio siga bajando, lo cual no hace sino acentuar la baja.

Por otra parte, si antes de la crisis (se coincide en que el punto de inflexión es la quiebra de Lehman Brothers) los importadores se apuraban a comprar por temor a la suba, ahora dilatan la decisión porque creen que el pollo costará mañana, menos que hoy.

“El primer semestre será difícil”, vaticinó Domenech. Sin embargo, empresarios del sector que hablaron con Infocampo sostienen que se van a arremangar para capear el temporal, pero sin aflojar en la apuesta.

“Hemos invertido en estos años y vamos a trabajar más duro para sostener nuestro posicionamiento”, dijo un empresario entrerriano, cuyo 30% va al mercado externo.

(Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario)

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