El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), junto a las autoridades de las provincias vitivinícolas, dio a conocer ayer los detalles del proyecto de modificación de la Ley de Vinos. La propuesta ya se encuentra en condiciones de ser elevada al Poder Ejecutivo Nacional.
Uno de los temas abordados fue la jurisdicción que el Instituto posee sobre todos los productos del sector, siendo que hasta el momento no son controlados por la entidad productos como el vermouth, los “frisantes” y la grapa, hoy bajo la órbita del Ministerio de Salud.
Otro de los pasajes del proyecto hace referencia a las uvas “tintoreras”. Según informa el matutino Los Andes, tras horas de diálogo se llegó a la determinación de establecer porcentajes aceptables en cuanto a la presencia de la variedad Aspiran Bouche. En caso de incumplimiento, los valores excedidos deberán ser etiquetados o bien se aplicarán las sanciones correspondientes.
El presidente del Instituto, Guillermo García, destacó que considera importante aprovechar la estructura del INV para fiscalizar el producto, y contar con un esquema más riguroso en términos de productos, multas y posibilidades de ampliar “castigos”. “De aprobarse el proyecto, podremos hacer clausuras desde 10 días hasta 5 años”, agregó García.
