La Sociedad Rural Argentina realizó una reunión de delegados zonales y autoridades de la entidad en la ciudad bonaerense de 9 de Julio, donde se planteó la situación sobre la inseguridad rural en la provincia.
“Estamos en una situación de total desamparo de seguridad. Hemos intentado mediante diferentes vías de comunicación que existen con el gobierno provincial, pero no obtuvimos ninguna respuesta” dijo Abel Guerrieri, Director de la Sociedad Rural.
Del encuentro participaron Héctor Hernández Vieyra, del Comité de Seguridad Rural de la SRA, representantes del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, del ámbito policial, de la Secretaría de Seguridad y de Producción de la Municipalidad de 9 de Julio. Los representantes de los productores plantearon a la cúpula policial la falta de seguridad que sufren los habitantes de la región, en especial por la falta de recursos humanos, vehículos, combustible y equipamientos.
Dante Rossi, Director General de Prevención de Delitos Rurales del Ministerio de Justicia, reconoció que “faltan elementos para realizar una tarea eficaz ya que por ejemplo, un móvil de patrulla rural no puede funcionar con una tarjeta de tan sólo 500 pesos para combustible que alcance todo el mes, ni puede esperar meses a que le arreglen un neumático pinchado”.
El Director de esa entidad realizó anuncios similares a los que había realizado el Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Ricardo Casal, relacionados con la creación de la Super Intendencia de Delitos Rurales, la instalación de antenas para la utilización del “botón de pánico” y también tomó nota de los diferentes informes que le acercaron los delegados zonales.
A partir de la promesa de una respuesta a la falta de seguridad por parte del Ministerio de Justicia, los representantes de los productores expresaron que “los anuncios en materia de seguridad en la Provincia de Buenos Aires nunca llegan y si no contamos con plazos concretos, denunciaremos públicamente al Ministro Casal y al Gobernador por el desamparo que vive el productor”.
