Pablo Rojo dijo que el único objetivo que se persigue es totalmente ‘fiscalista’. ‘El gobierno debe hacerse cargo que desde hace dos años viene aumentando las retenciones con el objetivo de bajar el costo de los alimentos y por el contrario han aumentado. Entonces ha fracasado. No conforme con esto, sigue con las mismas medidas’.
‘Inevitablemente esta medida va a tener efectos negativos sobre la producción’, estimó Rojo.
En la misma línea, Ricardo López Murphy manifestó que además de no entender el mecanismo de aplicación de las retenciones móviles, ‘ a simple vista esta medida tiende a discriminar las pequeñas economías y productores del interior del país’
‘Siguen aplicando medidas que distorsionan el mercado con el solo objetivo de concentrar dinero para la caja del poder. La idea de sacarle al campo para subsidiar a otros sectores es errónea. Brasil y Uruguay están haciendo totalmente lo contrario a nuestro país.’
Jorge Ávila de la Universidad del CEMA, remarcó ‘que con las actuales retenciones el gobierno cierra aún más la economía, acercándose a los niveles desesperados de retenciones que se tenía en el gobierno de Alfonsin’.
‘Reforzar el superávit fiscal de una manera tan ilusa y frágil y atarlo al precio de los comodities es casi riesgosa, cuando todos saben que lo que se debe hacer es ajustar el gasto público’.
Seguimos yendo a contramano del mundo, estimó Ávila. ‘Mientras el mundo demanda cereales y oleaginosas, nosotros alentamos la desinversión por sobre todo el interior del país’
‘Estaremos expectantes a ver qué sucede cuando Estados Unidos salga de su crisis bancaria y se derrumben los precios internacionales de varios productos entre ellos los granos’, remarcó.
Gustavo Malem
