Políticos, dirigentes, especialistas y sociólogos consultados hoy por Infocampo opinaron sobre cuál creen que debería ser el método más adecuado para lograr que el gobierno nacional elimine la excesiva intervención que aplica sobre los mercados agropecuarios.
Manuel Mora y Araujo; sociólogo: “La protesta activa no es el camino más correcto para encarar un reclamo. El agro debería modificar los términos del problema, pasando del lugar de víctima al lugar del que propone, dado que es el sector que mayor peso tiene en la economía nacional. Y para esto la estrategia más adecuada para lograr cambios es actuar sobre los diputados nacionales y gobernadores”.
Ricardo López Murphy; dirigente político: “Lo más valioso e inteligente que podría hacer el agro es iniciar una campaña de difusión en cada uno de los pueblos del interior del país, explicando la discriminación del actual sistema político. La obsesión del matrimonio Kirchner es ganar las elecciones el año que viene y la única traba que tienen es que todos los sectores de la sociedad se organicen. Hay que crear un sentimiento de la comunidad entera sobre la importancia y el impacto que tiene el campo en todo el país”.
Emilio Rached; senador nacional: ‘Estamos ante una oportunidad histórica de institucionalizar los reclamos del sector agropecuario y ante esto hay que actuar con inteligencia para aprovechar el escenario y avanzar en las organizaciones gremiales para obtener logros y respuestas a los reclamos. No creo que volviendo a realizar protestas en las rutas se logre generar un consenso aún mayor en la sociedad’.
Héctor “Toti” Flores; diputado nacional de la Coalición Cívica y ex piquetero: “Los cortes de rutas han sido muy exitosos en su momento, pero no se debe caer en el error de desgastar el método, dado que se puede lograr un efecto contrario al que se busca, perdiendo el consenso de la opinión pública. Hay que encontrar formas creativas de lucha, manteniendo viva la rama de lo que fueron las protestas. También hay que aprovechar el apoyo masivo de la población argentina al campo y que el gobierno no logró dividir y quebrar este respaldo”.
Osvaldo Salomón; intendente de Chabás (Santa Fe): “Habría que generar consenso en cada una de las comunidades para encontrar el método más adecuado de protesta. Sería un error encarar las movilizaciones como exclusivas del sector agropecuario; hay que intentar transformarlo en un reclamo de cambio de políticas de toda la sociedad argentina. Personalmente planteo una rebelión del interior productivo, porque vamos camino a un incendio sin precedentes en la historia de nuestro país. Volver a las rutas podría generar enfrentamientos entre los ciudadanos y esto sería muy negativo para todos”.
Sara Horowitz; directora del Posgrado de Negociación y Cambio, de la Escuela de Graduados de la Facultad de Agronomía de la UBA: “El sector agropecuario debe buscar nuevas formas para realizar sus reclamos buscando siempre el diálogo, que nunca se inició. También se deben encarar pedidos más sencillos y menos evidentes, utilizando otras vías de comunicación. Ahora la situación es diferente y hay que valorarla como tal, abriendo nuevos espacios. Hay que explorar qué mesa de diálogo es posible, dado que el gobierno (nacional) no está dispuesto a ceder en todos los reclamos del agro”.
Pedro Morini; diputado nacional por la Unión Cívica Radical: “La nueva protesta del agro debería basarse en un cese de comercialización de carnes y leche. También habría que impedir la salida de productos lácteos de las plantas. Salir a las rutas en este momento no es recomendable, pero si el gobierno (nacional) sigue en esta postura, habrá que hacerlo. La única vía de negociación posible es que se firme un gran acuerdo nacional entre el oficialismo, oposición y las entidades”.
Marcos Rodrigué; intendente de Inriville (Córdoba): “Los cortes de rutas fueron efectivos en su momento, pero ahora hay que buscar otras maneras de mostrar que debe haber señales del gobierno nacional hacia el sector agropecuario. Hay que discutir los temas a un nivel político para encontrar soluciones. Esto se hace ejerciendo presión a través de los representantes, como se da en cualquier democracia normal”.
Lorenzo Basso; decano de la Facultad de Agronomía de la UBA: “Hay que realizar un análisis exhaustivo de la situación del sector agropecuario, porque los cambios que ha habido en los últimos meses fueron muy grandes. Luego se debe demostrar a la población que la protesta tuvo un sentido claro, que fue la federalización del país, y ahora habría que realizar otro tipo de movilizaciones para que el gobierno llame a una mesa de diálogo en serio”.
Jorge Lestini; vicario parroquial de la Iglesia Catedral de Resistencia: “El reclamo debe basarse en un nuevo plan agropecuario nacional y en repensar un modelo de país nuevo. Hay que ejercer presión para realizar un acuerdo macro donde estén incluidos todos los sectores de la sociedad. El ámbito de protesta es el Congreso de la Nación. Hay un reclamo de toda la sociedad y el gobierno debe darse cuenta”.
Raúl Ponzio; intendente de Las Rosas (Santa Fe): “El mejor plan de lucha es plantear los reclamos en ámbitos de decisiones como en el Congreso de la Nación. Hay que insistir con el gobierno (nacional) y si es necesario llamar a una no comercialización de productos agropecuarios. Habrá que imponer una Ley al gobierno nacional para que la respete. Todas las comunidades del interior del país nos estamos viendo muy afectadas”.
Cristian Gribaudo; legislador del PRO: “No debe haber actos ni movilizaciones masivas; hay que seguir organizando asambleas. También debe haber muchas visitas al Congreso porque esto es lo que trajo conciencia a los diputados, que finalmente entendieron, unos cuantos, cuál es la problemática”.
