El gobernador Maurice Closs admitió que tuvo que pedir asistencia al Estado nacional para el pago de aguinaldos a trabajadores oficiales de Misiones, según publicó La Nación.
El mandatario contó que se reunió de urgencia con el ministro de Economía, Axel Kicillof, quien le confirmó el envío de los primeros 80 millones de pesos para afrontar gastos que en total, entre sueldos aumento a los policias (el resto de los empleados oficiales también exigen incrementos similares) y aguinaldos, supera la suma de 700 millones de pesos antes de concluir 2013.
Closs reiteró que el el Estado misionero carece de recursos para hacer frente a las crecientes erogaciones. Dijo asimismo que en el actual contexto financiero “la situación de las provincias es inviable, porque crece la inflación y se estanca la economía”.
Respecto del planteo de los demás agentes públicos pidiendo asimismo aumento de sueldos, manifestó: “cada uno en su momento recibirá lo justo y lo que podamos dar. Pero les pido que pasemos diciembre en paz, que no condicionemos al otro, que no sea la fuerza el mecanismo de imposición de las condiciones, en ningún ámbito”.
Según el jefe del Estado de Misiones, “la Argentina ha vivido una de las semanas más difíciles en sus 30 años de democracia, solamente comparables con el levantamiento carapintada contra Raúl Alfonsín en 1986, o con la crisis que soportamos en 2001”.
Es de señalar que en sus declaraciones no habló de normalizar la situación de los empleados administrativos que cobran en negro. En cambio, el ex gobernador Ricardo Barrios Arrechea (UCR) opnó que la irregularidad “afecta a casi el 40% del total del plantel. Por eso la mayoría quiere seguir trabajando. Los únicos que cobran el 82% conforme lo establece la ley, son los legisladores, magistrados del Poder Judicial, intendentes y ediles jubilados de esta provincia, un régimen de privilegio inadmisible”, afirmó el dirigente opositor.
