El próximo 28 de febrero, la firma Pauny inaugurará una nueva planta en Venezuela, en donde se ensamblarán los modelos 230 y 250 A, en el marco de un convenio entre la empresa argentina y el gobierno venezolano.
Este acuerdo, por un monto total de u$s55 M, contempló en una primera etapa el armado de 400 tractores y la construcción de la planta ensambladora en el municipio de Turén, en el estado de Portuguesa.
Los primeros pasos se dieron en 2008. Tras la instalación por parte de la firma de la planta ensambladora en Turén, comenzó el proceso de ensamblado de unidades, bajo la modalidad CDK (Completly Knocked Down, por sus siglas en inglés).
En un contexto de retracción a nivel durante 2009, el comercio exterior permitió balancear en parte este desfasaje con el mercado interno.
En esta fase del emprendimiento implementada en Turén se ensamblaron un total de 150 unidades. En esta fase, la mano de obra es venezolana, mientras que los componentes son de origen argentino.
La segunda parte de este acuerdo continuará en la planta de El Sombrero. Las nuevas instalaciones, con una superficie total de 6.000 m2, albergarán el total de la producción en el rubro tractores. En esta etapa, se completarán las 400 unidades previstas al inicio del acuerdo.
Pero a diferencia de la primera etapa, desde la empresa indicaron que la intención es aumentar en forma paulatina el porcentaje de componentes venezolanos en los tractores 230 y 250 A.
Por su parte, la planta de Turén tendrá como destino el ensamble de maquinaria vial, también bajo la modalidad CDK, con componentes nacionales y mano de obra venezolana.
Los tractores 230 y 250 están equipados con motor Cummins 6 B 5.9, diésel de cuatro tiempos, y frenos a disco en baño de aceite, de accionamiento hidráulico independiente o simultáneo.
Entre otras prestaciones, cuentan con toma de potencia totalmente independiente, de accionamiento mecánico manual y levante hidráulico de tres puntos.
Artículo publicado en la edición de hoy de Infocampo Semanario