Un informe de la consultora Ecolatina señaló que la elevada brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo modificó el comportamiento de individuos y firmas, alterando sus decisiones de ahorro, consumo e inversión.
Las familias pasaron a privilegiar la inversión en ciertos bienes durables y el gasto en turismo en el extranjero, atados al Dólar oficial. Mientras que las ventas de autos 0 km muestran un fuerte crecimiento, el consumo se desacelera.
El cepo cambiario y la brecha profundizaron el déficit del turismo y acentuaron el retiro de las cuentas de depósito en moneda extranjera, presionando a la baja las Reservas vía caída de los encajes.
La brecha también generó que las firmas busquen mecanismos para captar dicho spread. El riesgo de de subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones aumenta en este contexto, así como el endeudamiento en pesos a la espera de licuar vía inflación el crédito obtenido.
Esto explica en buena medida el actual deterioro de las condiciones económicas, que se ve reflejado en la caída de la confianza de los consumidores y en el ajuste a la baja de las proyecciones de actividad y reservas.
