Y lo que parecía que iba a ser, jamás sucederá, al menos durante este año.
En febrero pasado, Raúl Giñazú, presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), anunció con bombos y platillos que la producción vitivinícola de todo el país aumentaría en rangos superiores al 8 % en las principales provincias productoras. Los datos para Mendoza indicaban un crecimiento mayor al 15 %.
Pero, el arranque y los hechos demostraron lo contrario.
Días atrás desde la delegación del INV en San Juan corrigieron aquellos datos y proyectaron una merma del 7 por ciento respecto del pronóstico último de cosecha, lo que significa que se levantarán 61 millones de kilos de uvas menos que lo calculado incialmente.
“Hubo una sorpresa generalizada de los productores y de los técnicos que trabajan las fincas, todos esperaban un mayor aumento y no lo lograron.
Las gamelas se llenan de racimos y en vez de pesar 20 o 21 kilos sacan un promedio de 18 o 19 kilos”, explicó Juan Luis Lépez, jefe de la delegación local del instituto.
Con esta modificación se espera ahora en San Juan una cosecha de 819 millones de kilos de uva, en lugar de los 880 millones estimados en la medición anterior.
Las bajas más notorias se han producido en las zonas de Albardón, Angaco y San Martín, donde rondaron el 12 %.
En los departamentos productivos de Sarmiento, Caucete, 25 de Mayo y 9 de Julio, estas caídas son algo inferiores. Los profesionales lo atribuyen a factores climáticos y fisiológicos de las plantas. Hizo mucho calor en momentos inoportunos del crecimiento y los granos de uva dejaron de crecer, quedaron chicos y, por lo tanto, no llegaron a tener el kilaje que se esperaba.
Rodolfo Mó, uno de los principales productores de la provincia, aseguró a Infocampo que estas bajas no producirán ninguna alteración en los precios, que continúan con la tendencia que comenzó hace 2 años.
“Los productores seguimos invirtiendo, seguimos apostando, los insumos son más caros, las grandes bodegas cierran acuerdos y pactan precios, el salario de los trabajadores aumentó y nuestra rentabilidad sigue cayendo.”
Mó atribuyó la merma en la producción por las grandes variaciones climáticas. “Lluvias cuando no se necesitaban y heladas tardías.”
En referencia a los reclamos realizados al Gobierno, el productor dijo que “Gioja (gobernador de San Juan) está muy quieto. Nosotros pedimos que intervenga el Gobierno Nacional, pero todavía seguimos esperando respuestas”.
“La semana pasada nos visitó Javier De Urquiza, y no dijo absolutamente nada. Su discurso fue falto de decisiones. Fue light. Esperábamos más. El sólo vino de paseo”, dijo Mó.
Riego. “Tuvimos muchos problemas para que nos otorguen agua para abastecer nuestras quintas”, manifestaron a Infocampo la mayoría de los productores consultados.
En cuanto a variedades, las uvas tintas son las que vienen con mayor merma, aunque el kilaje total de éstas en San Juan no incide tanto en el pronóstico de cosecha como sí lo hacen las Moscatel o Torrontés que están en plena etapa de recolección.
¿Y Mendoza?
Aunque sin dar cifras oficiales, fuentes del Instituto Nacional de Vitivinicultura confirmaron que en gran parte de la provincia se están registrando bajas considerables en la producción.
Uno de los departamentos más afectados sería San Rafael, donde las mermas rondarían el 10 % sobre lo estimado anteriormente. La semana próxima se realizará un relevamiento general de cosecha.
Gustavo Malem
gmalem@infocampo.com.ar
