En el marco de una reunión con el diputado Rodrigo Brizuela y Doria, integrantes de la Cámara Riojana de Productores Agropecuarios solicitaron en forma urgente que se declare la Emergencia Económica para el sector vitícola, pese a que “una ley como esta no soluciona los problemas del sector”, según afirmaron.
“Es una herramienta para resolver y que el mismo gobierno provincial puede utilizar para gestionar a otros niveles la ayuda y medidas de recuperación y crecimiento del rubro”, señalaron.
Para CARPA, los motivos son múltiples, entre los que se destacan “el exceso de oferta que hubo el año pasado, que hizo bajar el precio del vino y por ende también el de la uva; los costos internos, que subieron de una manera más que considerable; y la situación llevó a que el viticultor esté desfinanciado”.
Asimismo, indicaron que “la vendimia 2012 presentó una merma de alrededor del 24 por ciento en toda la provincia, lo que agrava la situación del productor vitícola riojano”, y que “existe un estancamiento en la comercialización del vino con una abrupta caída en su consumo a nivel global”.
Finalmente, indicaron que la falta de rentabilidad de la actividad “pone en riesgo la sustentabilidad de un importante número de fuentes genuinas de trabajo tanto directo como indirecto que es necesario preservar”, por lo que consecuentemente la economía del sector está “en serias complicaciones por el estancamiento de los precios de venta de los productos lo cual torna dificultoso poder mantener y mejorar la infraestructura instalada”.

