Recordemos los sectores que hoy están recibiendo estos reembolsos:
1) Frigoríficos avícolas.
2) Tamberos.
3) Elaboradores de aceite refinado.
4) Productores de trigo.
5) Granjas porcinas.
6) Establecimientos de engorde a corral (feedlots).
7) Molinos harineros.
A estas actividades hay que sumar las industrias lácteas, que ya tienen definido su sistema de compensación (ante el aumento de la leche) y los molinos de molienda seca de maíz, que hasta ahora no han cobrado un solo peso (se desconocen motivos).
La administración pública del sector agro desconocía, o mejor dicho no tenía, la gimnasia de manejar pagos, cuestión en que la Oncca se vio metida de la noche a la mañana, cuando se decidió implementar el sistema.
Adecuar la estructura administrativa a esta tarea implicó tener que manejar información, contrastarla y hacerla consistente, en el medio de un circuito de control.
Hoy más de 1.000 productores de trigo han cobrado reembolsos, así como unas 50 granjas porcinas, otros tantos feedlots, unas 20 empresas avícolas, 4 aceiteras y un número importante de productores tamberos, en el orden de los 8.600.
En este último punto vale la pena detenerse, porque en la información que va dando la Oncca, así como las resoluciones de pago que se promulgan, cada ítem de pago corresponde a un tambo y una misma empresa puede tener varios tambos. Al mismo tiempo, como los proveedores de las principales lácteas ya cobraron dos o tres meses, el número que dan los comunicados de la Sagpya (19.303 destinatarios total sistema, según la gacetilla del miércoles 25) es en verdad menor cuando se considera los CUIT de quienes accedieron al reembolso.
Hecha esta salvedad, la información que está condensando la Oncca es más que valiosa para poder analizar la estructura productiva de los distintos sectores compensados.
Por caso, en el sector de la producción porcina se percibe ya (en base a los que cobraron) un grado de concentración muy superior al de los feedlots.
Otro dato interesante será conocer cuánta de la leche que se estima se produce mensualmente en el país ingresó al sistema formal, de donde se puede deducir que en el porcentaje restante está, o bien la informalidad, o bien aquellos que como se dice vulgarmente prefirieron resignar el reembolso para que no le cuenten las costillas.
Igualmente los números conocidos hasta ahora, posiblemente con excepción de los tamberos, llevan a pensar que son muy pocos los que han aprobado el examen de la formalidad.
Si tomamos el caso de los productores, se estima según datos del último censo nacional agropecuario (2002) que hay unos 80.000 en todo el país.
Cuando se baja al escalón del registro de la Afip (RG 1.394) ese número ya se reduce a unos 40.000. Hasta ahora, en las compensaciones solo un poco más de 1.000 han cobrado y se estima que en total se presentaran entre 4.000 o 5.000. ¿Y el resto?
En el caso de los tambos, donde la compensación está más avanzada, el número de tamberos reales que cobró ronda los 8.600, sobre un total estimado también por el censo en torno de los 12.000. Estos números terminarán definiendo cuál es el porcentaje formal real de la actividad.
Paralelamente, la información solicitada por la Oncca exige el volumen procesado por la industria (independientemente del destino externo o interno de la producción), lo cual permitirá conocer realmente el market share de cada empresa.
En el caso de los feedlots, los números son interesantes. Según el registro del Senasa, había unos 500 feedlots inscriptos en todo el país.
Pero cuando la Oncca pidió que se le pasara el peine fino, es decir los que realmente estaban en actividad, ese número se cayó a la mitad.
Hasta el momento sólo 50 cobraron su reembolso, pero se estima que unos 200 lo terminarán haciendo. Cuando esta información se complete hasta se estará en condiciones de prever la oferta de hacienda gorda, en función de cómo están los corrales.
También se podrá saber cuál es la incidencia del engorde a corral, real, sobre la oferta total de animales terminados, etcétera, etcétera.
Un último efecto colateral del sistema: la Afip está recibiendo pagos de empresas que se están poniendo al día impositivamente para poder acceder a los cobros. Información y formalidad son la oportunidad del sistema.
