La ingeniera agrónoma Norma Costa, directora técnica del laboratorio de Protección Vegetal y Biotecnología del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Concordia, dijo que se corre el riesgo de que esta enfermedad se introduzca en el territorio argentino y ataque a los cítricos si no se toman recaudos sanitarios.
La científica precisó que la gravedad para la citricultura nacional reside en que, si bien en la Argentina no fue detectada la enfermedad, nuestro país cuenta en forma abundante con el insecto transmisor.
El mismo tiene el aspecto de una chicharrita de entre 3 y 4 milímetros y es capaz de portar en el cuerpo la bacteria causante de la enfermedad y transmitirla a las plantas sanas.
La ingeniera Costa dijo que entre los síntomas del Huanglongbing (enfermedad del dragón amarillo, en chino) se pueden apreciar en los cítricos el amarilleo de las hojas generalmente en una rama o un gajo que se distingue de los demás no afectados.
En cuanto al fruto, éste queda deformado y asimétrico, reduciéndose su tamaño y con las semillas abortadas.
Son necesarias inversiones inmediatas para el equipamiento de los laboratorios e insumos.

