El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, resaltó la “solidaridad” del Estado al generar “igualdad de oportunidades con la creación de oficinas de empleo en todo el país”, y lo contrapuso con “las actitudades mezquinas de algunos sectores”, en refencia al lock out declarado por las patronales agropecuarias luego de la aprobación de la ley de revalúo inmobiliario rural bonaerense.
En la inauguración de una oficina de empleo en Almirante Brown, el ministro resaltó la “solidaridad” que conllevan las oficinas que apuntan a acercar el mundo del trabajo a los lugares más desprotegidos.
“Y fíjense eso, que diferencia esa solidaridad, con referencia a otros sectores, mezquinos, sectores que están protestando porque se les pretende cobrar el mismo impuesto que paga el habitante de la Ciudad de Buenos Aires, de la provincia de Buenos Aires, y de las zonas urbanas”, dijo.
“Yo les pido que reflexionen, que sepan que esta tarea, y este país, como dijo alguna vez el general (Juan Domingo) Perón, ´O lo arreglamos entre todos o no lo arregla nadie´”, precisó Tomada.
Y agregó que “es hora que ellos también hagan un esfuerzo para estar a la altura del tiempo histórico que vivimos”.
En el acto, del que participó también el secretario de Empleo, Enrique Deibe; y el intendente Darío Giustozzi; el ministro definió a las oficinas de Empleo como “un puente”.
“Son un puente entre quienes buscan trabajo y quienes siguen apostando a invertir en el país, a generar nuevos puestos, e incluir a todos los hombres y mujeres”, afirmó.
El ministro recordó que “como decía la presidenta, si hay una palabra que define nuestro proyecto puesto en marcha allá en el 2003, esa palabra es ´Trabajo´, esa palabra caracteriza este proyecto político”.
“Estamos convencidos que es a partir del trabajo que en nuestro país se generó esa cohesión social, esa inclusión social, esa Argentina que estamos recuperando, que era de todos, y es para todos”, dijo.
Tomada argumentó que “todo esto lo hemos demostrado, porque donde no había trabajo generamos cinco millones de puestos; donde no había diálogo pusimos en marcha las negociaciones colectivas, donde había un salario absolutamente devaluado, logramos poner en marcha el salario mínimo y la permanente y anual actualización”.
“Estamos trabajando todos los días pensando cómo movilizamos recursos, voluntades y espacios para que el empleo siga siendo ese factor de inclusión social”, dijo, y citó “la política de inserción laboral de jóvenes donde más de 240 municipios la tienen en marcha”.
Tomada resaltó que esta política “trata de la solidaridad bien entendida, porque el Estado no puede estar ausente cuando hay sectores vulnerables”.
“Estos problemas no los resuelve el mercado, porque el mercado discrimina y deja afuera a jóvenes sin capacitación o experiencia laboral, asi como los que no tienen vínculos sociales para enterarse donde puede haber un trabajo”, manifestó.
El ministro finalizó con que “creemos que el Estado tiene que trabajar permanentemente por la igualdad de oportunidades y hacerse cargo, dar un paso al frente, por eso esta política”.