A raíz del aumento del 300% en el precio de la bolsa de papas, numerosos bares y restaurantes de Tucumán realizan un lock out patronal, que fue confirmado a la prensa local por el presidente de la Unión de Bares y Hoteles de Tucumán, Humberto Neme.
Según Neme, el objetivo es “no modificar la estructrura de costos ni los precios de los menús, y sacar o reducir la papa de las comidas”.
“Desde hace una semana hemos puesto carteles ˜No a la papa˜; el cliente pregunta por las causas y les explicamos que la bolsa de 50 kilos trepó de 45 a 135 pesos y ante esta situación, son solidarios y piden otras guarniciones”, destacó.
En tanto, Neme señaló que “queremos tener un Tucumán competitivo, y no podemos pasar el precio de una porción de papas fritas de 15 a 30 pesos”.
Finalmente, el directivo remarcó que “se reemplazó la guarnición con chaucha, remolacha, zanahoria o tomates, y confía en que la medida de boicot tenga éxito y que el precio se retrotraiga hasta un valor normal”.