Unas 84 personas debieron ser atendidas en distintos centros de salud de la ciudad de Buenos Aires entre anoche y este mediodía con heridas en los ojos y quemaduras en distintas partes del cuerpo por el uso de pirotecnia y descorches de botellas, en el marco de los festejos de Nochebuena y Navidad.
En el Hospital Oftalmológico Lagleyze, en el barrio de Paternal, fueron atendidas 38 personas, de las cuales cuatro son menores y uno de los adultos debió ser internado.
El jefe de Guardia del nosocomio, Carlos Assad, precisó hoy que “hubo 38 personas que fueron atendidas por heridas provocadas por pirotecnia y corchazos” y expresó que “hay un hombre de 45 años que debió ser internado y tiene comprometida la visión de un ojo”.
En este sentido, el médico caracterizó que, al haber un solo internado, la situación es de menor gravedad que años anteriores,en que hubo “4 o 5 pacientes con lesiones graves como el que tenemos internado ahora”.
“No sé si tuvimos suerte o es que la gente está usando menos pirotecnia”, expresó a pesar de reconocer que la cifra de heridos se mantiene similar a otros años.
En tanto, otras 26 personas acudieron entre anoche y este mediodía al hospital de Oftalmología, Santa Lucía, en el barrio de San Cristóbal, con heridas en los ojos también provocados por descorches y pirotecnia, de los cuales dos debieron ser internados, informaron fuentes médicas.
“En Oftalmología toda lesión es potencialmente grave porque hablamos de un órgano muy noble como la visión”, aseguró el jefe de Guardia, César Demonte, durante una conferencia de prensa realizada esta mañana en las puertas de ese centro de salud.
El especialista precisó que “la mayoría de los casos son ulceraciones o laceraciones en la piel por quemaduras, otros son contusiones que pueden producir un sangrado”.
Al referirse al nivel de gravedad de las heridas, aseguró que “todas estas lesiones pueden comprometer el órgano y la función visual”.
Demonte explicó que de los 26 casos, 12 son menores de 15 años; y que 23 del total “sufrieron heridas producidos por pirotecnia, dos por corchazos y uno por peleas”.
El médico precisó que el número total de lesionados se mantiene estable en relación al año pasado, cuando se atendieron 27 casos.
Por otra parte, los heridos por quemaduras en el cuerpo a raíz del uso de pirotecnia que fueron atendidos en el Hospital del Quemado, en el barrio de Caballito, fueron 20 en total, 14 niños y seis adultos.
No obstante, ninguno de ellos presentó un nivel de gravedad que requiriera internación, aunque sí controles o cirugías posteriores, informó la jefa de urgencias del hospital, Myriam Miño.
Los 20 pacientes atendidos ayer no representan un incremento respecto de los registros del año anterior, ya que en 2012 el hospital atendió 45 personas lesionadas por pirotecnia entre el 24 y el 25 de diciembre.
“No ha aumentado la cantidad de atención, sino la calidad ya que ahora se observan personas quemadas en todo el cuerpo y no sólo en las manos como ocurría antes”, dijo la especialista, que vinculó esta situación con el tipo de pirotecnia utilizada, de mayor potencia.
La médica aclaró que todos estos casos corresponden a personas “atendidas por primera vez” en el hospital, por lo que el número de lesionados por pirotecnia puede aumentar en el transcurso del día cuando, además de nuevos casos primarios, comiencen a llegar personas derivadas de otros centros de atención.
Por otro lado, Miño llamó la atención respecto de la vulnerabilidad de los niños frente a la pirotecnia y la necesidad de actuar en prevención.
“Los más vulnerables son los niños, porque hasta la más benigna estrellita no la saben utilizar; y muchos de los niños lesionados no estaban manejando pirotecnia, sino que les llegó no se sabe de dónde, y los lesionaron”, dijo.
