Por cuarto año consecutivo, fracasó en la Legislatura porteña el intento del oficialismo de regular y controlar la actividad de los cuidacoches en todo el ámbito de la ciudad. Ayer, en la última sesión ordinaria del año, el proyecto de Pro no logró los votos necesarios para ser discutido dentro del recinto, por lo que el debate de la problemática se postergó hasta el año próximo.
El tema se sumó a la agenda a última hora del miércoles. Se intentó su tratamiento sobre tablas, para lo que se requería la aprobación de al menos dos tercios de los legisladores presentes en el recinto para ser discutido.
Esa posibilidad fue apoyada por el oficialismo y los bloques de Confianza Pública y parte de UNEN, pero recibió el rechazo de los legisladores del Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro, Sindical Peronista, Seamos Libres, Partido Socialista Auténtico, Bien Común, MST, Frente de Izquierda y de los Trabajadores y el Frente Progresista Popular.
Cinco proyectos distintos sobre el tema circularon por la Legislatura durante 2014. Fueron propuestos por el Ejecutivo y los bloques de Pro, Nuevo Encuentro, Frente para la Victoria y MST. A pesar de que estuvo en la agenda diaria de los legisladores, quedó estancado una vez más.
En diciembre de 2011, Mauricio Macri vetó el proyecto de ley que habían confeccionado el Frente para la Victoria y otros sectores de la oposición que proponía la creación de un registro de cuidacoches. Al año siguiente fracasaron las propuestas del jefe porteño y de Ritondo. Y en 2013 el Ejecutivo planteó la posibilidad de prohibir la actividad y sancionar con multas económicas y días de arresto a quienes se encuentren en infracción. Pero la propuesta no logró el aval de los legisladores, como ocurrió ayer.