El viernes pasado el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, citó a representantes de los principales frigoríficos del país, tanto exportadores como consumeros, para exigirles que controlen los precios que están pagando por la hacienda.
La reunión, realizada en las oficinas porteñas de Moreno, consistió en un extenso monólogo del funcionario (que nadie se atrevió a interrumpir).
En las últimas semanas la oferta de hacienda, tanto liviana como pesada, se viene retrayendo a causa de una sequía feroz (que afectó de manera profunda a Buenos Aires, la principal provincia ganadera argentina) combinada con la falta de estímulos promovida por la política K.
Ante el presente panorama, Moreno les comunicó a los representes de plantas frigoríficas que volverán a reunirse todos los viernes para que cada uno de los convocados presente documentación que acredite los valores efectivos abonados por la hacienda.
“Tradicionalmente, durante el mes de marzo hay siempre un reacomodamiento de precios son subas mínimas”, dijo hoy a Infocampo Luis Rodríguez Abínzano, presidente de la Cámara Argentina de Consignatarios de Ganado, para luego agregar que ese factor estacional está siendo profundizado por la escasa oferta de hacienda presente en el mercado.
Rodríguez Abínzano indicó además que si Moreno vuelve a fijar precios máximos en el Mercado de Liniers, la baja oferta de hacienda podría agravarse. “Eso puede potenciar aún más la falta de ganado”, puntualizó.
Según el último dato publicado por la Oncca, la producción de carne bovina durante enero-noviembre de 2008 fue de 2,852 millones de toneladas res con hueso, una cifra 3,3% inferior a la registrada en el mismo período de 2007.
