Los ministros de Educación, Alberto Sileoni, y de Trabajo, Carlos Tomada mantuvieron este viernes una segunda reunión informal con los cuatro sindicatos docentes nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT) de cara al inicio de las negociaciones paritarias previstas para la próxima semana. Los docentes adelantaron que no acepetarán un acuerdo anual, según publicó Minuto Uno.
Sergio Romero, secretario general de la Unión de Docentes Argentinos (UDA) explicó en diálogo con minutouno.com que durante el encuentro “se plantearon las posiciones de cada uno, sirvió para ver como está cada una de las partes” y, aunque aclaró que todavía no se habló acerca de porcentajes y cifras “entre nosotros hay un acuerdo y está totalmente decidido que no aceptaremos un acuerdo anual”.
Además de Romero en representación de la UDA, del encuentro que tuvo lugar en el Palacio Pizzurno también participaron Mario Almirón, secretario general del Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP); Jorge Dobal, secretario general de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y Fabián Felman, secretario general de la Confederación de Educadores Argentinos (CEA).
“Quedó en claro que nosotros nos mantenemos firmes en el concepto de que hay que negociar ahora y reabrir las paritarias en junio, vamos a tener que desdoblarlas, eso nos va a permitir realizar un monitoreo de cómo sigue la situación económica, además de que para junio vamos a tener terminadas el 80% del resto de las paritarias y eso también nos va a servir a nosotros” explicó a este medio Romero.
Aunque todavía no hay fecha fijada para el inicio de las negociaciones paritarias, los docentes esperan una convocatoria formal para los primeros días de la próxima semana de modo de que antes del 10 de febrero ambas partes estén sentadas de manera oficial en la mesa de negociaciones.
La negociación con el ministerio de Educación de la Nación sirve para marcar un piso en el sueldo de los docentes a nivel nacional. Después será cada una de las provincias las encargadas de negociar con los sindicatos locales el nivel en que cierran el acuerdo siempre respetando ese piso.
En los dos últimos años las negociaciones con el ministerio de Educación no llegaron a buen puerto y fue la cartera conducida por Sileoni la que de manera unilateral terminó fijando ese piso de modo de evitar que la dilación en las negociaciones retrasar el inicio de las paritarias en cada provincia.
En ese sentido Romero se mostró escéptico acerca de la posibilidad de poder alcanzar un acuerdo este año. Admitió que “el escenario es más difícil, más complicado que en los años anteriores”, aunque no descartó que puedan alcanzar el acuerdo que les fue esquivo en los últimos dos años.

