Tal como estaba previsto, el Frente para la Victoria logró imponer al ex gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, como candidato a la presidencia provisional del Senado, cargo que tiene gran relevancia institucional ya que integra la línea de sucesión presidencial, según publica Infobae.
Con 57 votos a favor y 12 en contra, finalmente Zamora fue elegido por la Cámara alta. Le negativa provino desde el bloque radical, mientras que el resto de los bloques parlamentarios acompañaron “por tradición y respeto” la propuesta de la mayoría.
La UCR se manifestó agraviada por la decisión del kirchnerismo, ya que tienen temas “irresueltos” con el senador que reemplazará a Beatriz Rojkés de Alperovich. El senador radical Gerardo Morales dijo que la posición de Zamora es “indigna y antiética” y adelantó que no votarán a favor de la designación del Poder Ejecutivo. De este modo rompió la tradición política de acompañar las postulaciones del kirchnerismo para los cargos que están en la línea de sucesión.
“Lamentamos tener que tomar esta posición frente a una decisión de la Presidente que abona esta lógica de debilitar el sistema de partidos, porque termina debilitando a su propio partido”, aseguró Morales.
Lo cierto es que la decisión de la mandataria generó revulsión en el seno del bloque oficialista. Al tomar la palabra el senador Miguel Ángel Pichetto recordó que como es tradición de las cámaras legislativas, “los cargos en la línea sucesoria tienen que ver con una decisión del Poder Ejecutivo”.
