Uno de los principales funcionarios del gobierno nacional se decantó esta mañana por la figura de Daniel Scioli, al ser consultado sobre cuál es el precandidato presidencial con el que prefiere trabajar, según publicó Infobae.
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, eligió al mandatario bonaerense en medio de la feroz interna que se vive en el Frente para la Victoria, donde la pelea pasa por definir quién es el elegido de Cristina Kirchner para la sucesión presidencial.
Aunque aclaró que todo lo va a definir “la jefa” del Frente para la Victoria, el hombre que pretende ser el próximo gobernador de la provincia de Buenos Aires no titubeó cuando le preguntaron cuál era su opción favorita entre todos los precandidatos del FpV: “Cada vez que me preguntan digo que me siento muy cómodo trabajando con el gobernador de la Provincia; en ese sentido soy coherente con lo que digo y lo que hago”.
“No me gusta andar con evasivas, yo me siento cómodo con Scioli, porque trabajo permanentemente con todos los gobernadores y en este ida y vuelta que tenemos uno afianza una relación”, reafirmó en declaraciones a Vorterix.
En cuanto a su continuidad en el ministerio de Seguridad, Berni explicó: “Vamos a ver cómo se da este camino hacia las elecciones Primarias y veremos. Todavía falta porque eso será en agosto y recién estamos calentando motores”.
El caso Nisman
El secretario de Seguridad aseguró en las últimas horas que le cree “muy poco” al técnico informático Diego Lagomarsino sobre su actuación en torno de la muerte del fiscal Alberto Nisman Y lo consideró “un gran sospechoso” que en otro país seguramente “estaría detenido”.
“Lo que está diciendo está guionado, lamentablemente no le creo”, sostuvo. “No tengo ninguna duda de que el señor Lagomarsino sabe más de lo que dice”, apuntó.
Respecto a la custodia del fiscal, el secretario de Seguridad precisó que “cuando salía a la noche no quería que absolutamente nadie lo custodiara”, e incluso “les prohibía a los efectivos dar información a sus cadenas de mando porque no quería que nadie se enterara de sus movimientos”.
